La buena técnica de leer y el arte de escribir

De la lectura y del arte de escribir. Rafael Tomás Caldera. Prólogo de Jaime Nubiola. Rialp

Se han escrito muchos libros sobre el arte de escribir. Este es el primero que conecta la lectura con la escritura. Y es el primer acierto de un pequeño tomo lleno de sabiduría. No nos gusta decir que un libro debe ser obligatorio. Para fomentar la lectura es mucho más eficaz decir que un libro debe ser prohibido. Este debería estar proscrito. Es un tomo breve, conciso, esencial, repleto de buenos consejos y mejores técnicas. Estos días leemos que los estudiantes jóvenes demuestran en España una baja comprensión lectora. Escriben poco y mal. Y siembran sus textos de incorrecciones gramaticales, faltas de ortografía, fallos de concordancia, y una escasa lógica. Lo vemos también en muchas redacciones periodísticas, para qué nos vamos a engañar. Y sin embargo el bien escribir, el bien hablar y, antes que esas habilidades, la buena lectura, serán las tres capacidades que más a diferenciar a los profesionales. Si no ha leído el Rafael Tomás Caldera, todavía está a tiempo.

El arte de escribir

De la lectura y del arte de escribir lo ha escrito un doctor en Filosofía y máster en Artes, doctor también en Letras por la Universidad de Friburgo y miembro de número de la Academia Venezolana de la Lengua. Alguien, por tanto, acostumbrado a vivir entre estudiantes. El libro, como recuerda Jaime Nubiola en el prólogo, se publicó en Caracas en 1983. Casi cuarenta años después sigue de actualidad, no solo por el clamor de los profesores que se quejan de la incapacidad de un elevado número de alumnos para leer con comprensión profunda y escribir con eficacia, sino porque esas dos son, junto a la oratoria, tres artes o técnicas imprescindibles en todas las profesiones, y por tanto en todas las facultades del mundo.

Lo que ofrece Caldera en De la lectura y del arte de escribir es un completo método. La lectura es “entrar en la comprensión del todo simbolizado en el texto”. Llegar a esa comprensión requiere esfuerzo, y el despliegue de una estrategia que tiene tres momentos: el análisis, la síntesis y la crítica, es decir el preguntarse y responder sobre el sentido y cualidad de un texto. “Para leer bien necesitamos al menos dos lecturas, es decir recorrer dos veces el texto”. Solo así, y con una actitud de apertura, conseguimos que “el libro libre su sentido y significado”. No se accede al contenido fácilmente, y cuanto más lata es una obra, con más dificultad. Conviene señalar en cada párrafo las afirmaciones más importantes, sintetizar la idea central, y hacer una crítica del fondo y de la forma. Confrontar también sus ideas con las nuestras.

Hay además algo importante en el acto de leer. Caldera nos invita a preguntarnos el para qué de las cosas. Si leemos no es por matar el tiempo, sino por cultivarnos, por mejorar nuestra vida. “Mucho lee quien lee bien”, recuerda. Por eso conviene leer sin grandes prisas ni apremios, dejando resonar las palabras que nos llegan al corazón y que nos descubren nuevas zonas del alma o de la sabiduría.

Y en el escribir, comienza por recomendar lanzarse a la actividad sin temores ni complejos. Hacer. Es realizando la actividad como en realidad la aprendemos. A partir de este empujón práctico, Caldera aconseja seguir los principios de la claridad, la unidad, el énfasis y la coherencia. Limpiar mucho los textos, podarlos de esos comienzos titubeantes, poner una cosa detrás de la otra, sin atropellos. Dice Caldera que no va a aportar recomendaciones originales pero sí que lo hace. Sobre todo cuando anima a ejercitar una profunda experiencia en la escritura: “la concentración en lo que se va a decir, con absoluta libertad frente al posible público lector, ha producido grandes obras de arte. Quien así escribe, traspasa el nivel de los tópicos, corteza de toda época”.

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Alfredo Urdaci
Alfredo Urdaci
Nacido en Pamplona en 1959. Estudié Ciencias de la Información en la Universidad de Navarra. Premio fin de Carrera 1983. Estudié Filosofía en la Complutense. He trabajado en Diario 16, Radio Nacional de España y TVE. He publicado algunos libros y me gusta escribir sobre los libros que he leído, la música que he escuchado, las cosas que veo, y los restaurantes que he descubierto. Sin más pretensión que compartir la vida buena.

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