La gran exclusiva (Reino Unido, 2024), es el segundo largometraje cinematográfico del veterano realizador televisivo Philip Martin. Al inicio de la película, la conductora del programa de noticias de la BBC Newsnight Emily Maitlis (Gillian Anderson) entra al foro para encontrarse con su productora de cabecera Esme Wren (Romola Garai) y una de sus reporteras e investigadoras, Sam McAlister (Billipe Piper). Maitlis tiene siempre a su lado un galgo color plomo muy aristocrático. Maitlis mira a su alrededor con una irrefutable seguridad en sí misma y les dice a las preocupadas Wren y McAslister: “tres mujeres y un galgo en la BBC: esto es muy diferente a cuando empecé a trabajar aquí”.
Newsnight está pasando por un mal momento, lo mismo que el Reino Unido, igual que el Palacio de Buckingham. La BBC ha anunciado despidos masivos, recortes presupuestarios, mientras el país calienta motores para salir de la Unión europea. En Palacio todo es crisis. Andrés, príncipe de York no puede sacudirse la conexión con Jeffrey Epstein, sus fiestas, las relaciones con menores. «El mundo es muy diferente», dice Maitlis al inicio de la película. Y parece que en Palacio todavía no se han enterado.
Los autores del guion son Peter Moffatt y Geoff Busettil. Se han basado en el libro escrito por el periodista Sam McAlister. Philip Martin es el director de las dos primeras temporadas de The Crown, y aquí ha construido un relato que encaja en el género del thriller periodístico. Está en la tradición de las películas que denuncian los abusos del poder. Se trata de una historia en la que un grupo de periodistas hacen bien su trabajo y consiguen que un poderoso declare, y quede desnudo ante la audiencia, mientras piensa (el poderoso) que ha hecho una jugada maestra.
Lo bueno:
- Tensión constante: La película te mantiene en vilo con su trama llena de suspense y giros inesperados.
- Actuación impecable: Rufus Sewell ofrece una actuación poderosa y matizada como el Príncipe Andrés, capturando su arrogancia y vulnerabilidad.
- Diálogo inteligente: Los diálogos son ingeniosos y perspicaces, lo que aporta profundidad a los personajes y a la historia.
- Tema relevante: La película explora el tema de la corrupción y el abuso de poder por parte de las élites, un tema que sigue siendo muy actual.
Lo malo:
- Falta de contexto: La película no ofrece suficiente información sobre las acusaciones contra el Príncipe Andrés, lo que puede dificultar la comprensión de la historia para algunos espectadores.
- Ritmo lento en algunos momentos: La película podría haber sido más concisa y con un ritmo más dinámico para mantener la atención del espectador.
- Final ambiguo: El final puede resultar un poco ambiguo e insatisfactorio para algunos espectadores, por ser muy elemental, y por caer en la autocomplacencia de los periodistas con su trabajo. En el fondo, lo que retrata es una respuesta momentánea y aislada a una crisis general de credibilidad de los medios tradicionales.
En general:
«La Gran Exclusiva» es un thriller político/periodístico intrigante y bien hecho que te mantendrá pensando mucho después de verla. La película ofrece una mirada crítica al poder y la corrupción, y destaca la importancia del periodismo de investigación.
Recomendación:
Si te gustan los thrillers políticos y te interesa el tema de la corrupción, «La Gran Exclusiva» es una buena opción para pasar una tarde entretenida y reflexiva.
Puntuación:
4/5
A tener en cuenta:
- La película está disponible en Netflix en varios idiomas, incluyendo español e inglés.
- La película tiene una duración de 107 minutos.
- La película está clasificada como R por lenguaje y contenido sexual.