El MUN ha presentado en Madrid el catálogo de la exposición Una tierra prometida. Del Siglo de las Luces al nacimiento de la fotografía, en un diálogocon la participación de los fotógrafos Joan Fontcuberta y Manolo Laguillo
El Museo Universidad de Navarra ha presentado en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando el catálogo Una tierra prometida, del Siglo de las Luces al origen de la fotografía, exposición que se puede visitar en Pamplona hasta el próximo 18 de agosto. Compone un recorrido fascinante por los antecedentes, el origen y el desarrollo de este arte, siguiendo las rutas de los viajes de exploración y expediciones científicas de los siglos XVIII y XIX.
El director artístico del MUN y comisario de la exposición (labor desempeñada junto a Rafael Levenfeld, fallecido el pasado noviembre), Valentín Vallhonrat; y el responsable de colección y exposiciones, Ignacio Miguéliz, se han dado cita con los fotógrafos Joan Fontcuberta y Manolo Laguillo, y con el profesor de la Universidad Complutense Rafael Llanos. En el encuentro han conversado en torno a la evolución del fenómeno fotográfico.
Desde la Ilustración, los científicos se acompañaban de dibujantes que iban plasmando los hallazgos de sus viajes. Fruto de estas rutas, nacieron los cuadernos de dibujos y los volúmenes de grabados que recogían los descubrimientos, y que luego dieron paso a la fotografía como testigo de los paisajes, monumentos y especies vegetales y animales desconocidos hasta el momento para Europa.
Una tierra prometida realiza un recorrido por estos trabajos, que han inspirado propuestas de nueva creación como Florilegium: se trata de una flora maravillosa y de invención propia que Joan Fontcuberta ha creado en el programa de residencias artísticas Tender puentes, en el que artistas contemporáneos dialogan con obras de la Colección MUN. Elaborada con Inteligencia Artificial, Florilegium ha ocupado las paredes del Museo hasta el pasado 9 de junio.
Así, en el encuentro, el artista catalán ha reflexionado sobre el presente y el futuro de la fotografía, que avanza hacia horizontes desconocidos, al tiempo que quiere profundizar en sus raíces. Por su parte, Manolo Laguillo se ha centrado en la irrupción de este arte en el primer tercio del siglo XIX como “una nueva actitud”, un fenómeno que nació de una forma peculiar. “La filosofía no estaba preparada para el descubrimiento de la fotografía”, ha sostenido Rafael Llano.
En su lugar, Llano propone apelar a la imaginación, puesto que la fotografía concebida como “objetiva” nos lleva inevitablemente al terreno de la subjetividad “y por eso, la imagen fotográfica puede actuar tan poderosamente en nuestra sensibilidad, en nuestras emociones y pensamientos, y, en definitiva, en nuestra conciencia”. En este contexto, Llano ha recordado que en sus inicios, el nuevo fenómeno no fue “aprovechado” directamente por el ámbito científico, mientras que el arte pronto supo encontrar en ella un medio de expresión.
El volumen de la exposición incluye una selección de las 900 imágenes que conforman el viaje hacia esta tierra prometida, a lo largo de más de 300 páginas. Está a la venta en el MUN y en Trama Editorial.