Laura Rodríguez Durán
Susana Fortes: » Nada que perder se aparta de los efectismos del thriller al uso»
Andrea Longarela: «El faro de los amores dormidos para mí es nostalgia, mar y amores de los que nunca se olvidan»
Virginia Troconis y Pablo Ojeda: «Comida vamos a llevarnos bien es un libro de nutrición, sin truco mágico’
‘Una luz fuerte y brillante’ amor en tiempos de guerra
‘El regreso de Carrie Soto’ lo nuevo de Taylor Jenkins Reid
‘Recuérdame Alice’ nunca se olvida el amor
‘La hipótesis del amor’, de Ali Hazelwood, un fenómeno editorial
‘Tú yo y un tal vez’ la cultura del amor
Paul Pen: «La metamorfosis infinita es más que la mera ejecución de una venganza»
Alice Kellen: «El mapa de los anhelos es una novela muy emocional»
Empar Fernández: «Será nuestro secreto es una novela en la que los personajes tienen un perfil propio»
El género por el que siento una inclinación especial es el género negro por lo que tiene de ventana al lado oscuro. Me gusta leer novela negra y concebir historias centradas en el crimen (asesinato, secuestro...) y sobre todo en el origen de la determinación de delinquir. También me interesa la fatalidad. El hecho de encontrarte en el lugar menos adecuado en el peor momento.
Creo que la novela negra permite ejercer de voyeur y estimula el llegar a pensar que las cosas malas solo les pasan a los demás. Conocemos el peligro, hurgamos en sus entrañas y paradójicamente nos sentimos a salvo.
Me interesa también la novela histórica contemporánea, especialmente la que se desarrolla en el siglo XX. De hecho últimamente alterno ambos géneros"