Inside Out (Pete Docter, 2015) nos introduce en el mundo de la mente de una niña de 11 años llamada Riley, cuando su familia se traslada de Minnesota a San Francisco, por el trabajo del padre. Es entonces cuando la niña tiene que dar un cambio a sus pensamientos y gestionar sus emociones para adaptarse a esta mudanza y la nueva realidad que supone.
Nos gusta verla otra vez y seguimos aprendiendo sobre las emociones
Aclamada universalmente por la crítica y considerada una de las mejores cien películas de la historia, concretamente la número 41, por la BBC, Inside Out, el famoso film sobre las emociones, sorprende todavía hoy, por su cuidado y costoso trabajo de animación, por su excelente e imaginativo guión, y su dinamismo. Ver hoy Inside Out nos sigue gustando mucho y sigue siendo un ejercicio de aprendizaje indudable.
El envoltorio visual de Inside Out es brillante y vanguardista. Los edificios y situaciones que van apareciendo, las islas de la personalidad, el vertedero de recuerdos, la central y la configuración de los cinco personajes que son las emociones, sigue resultando innovador y atractivo.
El resultado creativo de Pixar y Disney Inside Out que vio la luz en España en Julio de 2015 combinó resultados positivos en las críticas con éxito en taquilla y en premios.
Creo que otro aspecto acertado es la rapidez con la que todo se desenvuelve, todo pasa bastante deprisa, así que eso nos mete más en la historia y hace que pasemos por los mismos estados anímicos que pasa la protagonista, Riley, hasta el punto que odiamos el brócoli, salimos hartos del hockey momentáneamente y queremos volver hacia atrás en el tiempo.
Riley no puede ser feliz si falta Alegría en la central
Las cinco emociones principales, Alegría, Tristeza, Miedo, Ira y Asco tienen alguna que otra dificultad para armonizarse y afrontar el cambio de casa de Riley. Hay algo en esa sala de control que está saliendo mal.
Las islas de la personalidad de Riley se apagan cuando Tristeza y Alegría discuten porque Tristeza ha cogido los mandos de la central. Ese melancólico color azul del personaje está cobrando demasiada fuerza y eso no le gusta a Alegría, que se empeña en que Riley siga siendo esa niña adorable y feliz de antes.
Conectar los recuerdos esenciales, ser conscientes de que la niña no puede ser feliz si falta Alegría en la central, pero tampoco si falta cualquiera de las otras emociones, supone un crecimiento, que Riley no afrontará hasta que se sienta verdaderamente triste y supere ese dolor.
Porque resulta que Tristeza se ha leído los manuales y es la única que sabe volver a la central, cuando Alegría y ella son expulsadas de la misma y condenadas a vagar por encima del vertedero de recuerdos.
Será necesaria la pérdida de Isla payasada, la pérdida de isla de la amistad y encontrarse con el amigo imaginario de Riley, un algodón de azúcar, mitad gato, mitad elefante, mitad delfín, que llora “chuches”, para pilotar de nuevo el cerebro de la joven heroína hacía el equilibrio.
Como dice alguno de los personajes a lo largo de la película, las emociones no pueden dimitir, aunque Miedo se lo proponga y lo intente.
Si bien los recuerdos buenos esenciales de Riley están en Minnesota, habrá que crear unos nuevos recuerdos esenciales en San Francisco
La teoría de la inteligencia emocional como cimiento de ‘Inside Out’
Los productores de Inside Out consultaron a numerosos neurólogos y psicólogos y todos los descubrimientos de la neuropsicología para construir la historia. Y el resultado fue más que bueno, a juzgar por las alabanzas recibidas y los premios obtenidos.
Entre las personas que revisaron el proyecto están Dacher Keltner, especialista en las emociones y Paul Ekman, experto en inteligencia emocional y en la manifestación de las emociones en el rostro humano.
La definición surge en 1995 por Daniel Goleman en su libro “Inteligencia emocional”. Esta se define por el autoconcepto de uno mismo, el autocontrol, la empatía y las habilidades sociales. Y , siguiendo a Goleman, hoy en día habría que intentar inculcar en los niños y en general en todo ser humano esta idea unida a la focalización en lo que estamos haciendo en cada momento. La atención y saber gestionar las emociones, no sólo en el estudio o el trabajo, sino también en el área no académica, son elementos imprescindibles para tener un camino satisfactorio en la vida.
Los derroteros por los que transita ahora el concepto de inteligencia emocional pueden tener un punto de vista en el vídeo “Los beneficios de la inteligencia emocional para nuestros hijos” con Daniel Goleman entrevistado, y en la “guía de trabajo para los padres con base en Inside Out” de Paul Ekman.
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