Este es el SUV más potente de Audi, una bestia con aspecto de bestia y 640 CV de potencia que no deja de decir: “sí, quiero que me oigas al llegar y me mires al pasar”. Con esta máquina, Audi ha logrado un equilibrio interesante: un SUV que se comporta como un deportivo, pero que puede acompañarte a hacer la compra, aunque es posible que llegues antes de que abran.
Con su motor V8 biturbo de 4.0 litros, el RS Q8 Performance es todo menos tímido. Acelera de 0 a 100 km/h en tan solo 3,6 segundos y alcanza una velocidad máxima de 305 km/h. Nada mal para un vehículo que podría llevar a toda la familia. Audi ha apostado fuerte en el apartado de la suspensión, ofreciendo de serie una suspensión neumática adaptativa que hace que el coche se comporte igual de bien en la autopista que en un circuito, donde, dicho sea de paso, puede hacer récords de vuelta sin pestañear.
Estéticamente, el RS Q8 Performance no tiene nada que envidiar a los deportivos más exóticos. Este SUV combina una parrilla frontal negra, enormes tomas de aire y detalles en aluminio mate que le dan un aire robusto y sofisticado. Pero es en el diseño de su carrocería donde realmente brilla, con líneas agresivas que no dejan duda de que está hecho para destacar vaya por dónde vaya.
Para quienes buscan un SUV ágil en carreteras sinuosas, el RS Q8 Performance viene equipado con el sistema de estabilización activa del balanceo (eAWS). Esta tecnología permite que el SUV no pierda la compostura enlazando curvas, manteniendo el control incluso en situaciones exigentes. Y si eso no fuera suficiente, el vehículo también cuenta con dirección a las cuatro ruedas, lo que mejora notablemente su maniobrabilidad y convierte a este coche en una verdadera experiencia de conducción deportiva.
Por dentro también esta lleno de detalles. Asientos deportivos RS, sistema de infoentretenimiento de primer nivel y un diseño orientado a hacer que el conductor sienta que está en la cabina de un avión de combate. Desde el volante multifunción hasta la pantalla de 12,3 pulgadas, cada elemento está diseñado para una experiencia superior.
Además de la potencia y el diseño, Audi ha trabajado en el sonido del RS Q8 Performance, y no hablamos solo del “súbeme la radio”. Su escape deportivo, opcional, emite un sonido tan fuerte que podría despertar a los vecinos y hacer saltar las alarmas de los coches aparcados. Este es un coche hecho para ser visto y escuchado. Afortunadamente, lo del ruido no es obligatorio.
Con todo lo que ofrece, este coche se posiciona como una opción ideal si buscas un SUV muy deportivo que no solo cumpla, sino que sorprenda. No es un coche para cualquiera, sino para quienes buscan un rendimiento sin concesiones.