Algo pasa con Brandon
SINOPSIS
Un matrimonio desesperado por tener un hijo, un niño caído del cielo, una mentira oculta durante 11 años y una educación sobreprotectora… los ingredientes perfectos para una adolescencia muy problemática.
FICHA TÉCNICA
- Director: David Yarovesky
- Guión: Brian Gunn, Mark Gunn
- Reparto: Jackson A. Dunn, Elizabeth Banks, David Denman, Meredith Hagner, Matt Jones, Emmie Hunter, Gregory Alan Williams
- País: Estados Unidos
- Duración: 90 minutos
- Música: Tim Williams
- Fotografía: Michael Dallatorre
COMENTARIO
Los niños son la herramienta definitiva del terror. La aparición de un niño en pantalla nos evoca Los chicos del maíz, La profecía, ¿Quién puede matar a un niño? o El pueblo de los malditos, entre otras muchas.
¿Qué sucede si ese maravilloso niño caído del espacio no es Goku sino Vegeta? ¿Qué sucede si a la tierra llega Ultraman en vez de Superman? El hijo parte de una premisa interesante aunque no sea completamente original. Aunque ya sabemos que lo importante no es el destino sino el camino, y que la originalidad no es medida de todo, algo más le falta a este trabajo. Tras la idea matriz falta algo de empuje. Esta cinta no llega a ser una buena película de terror, ni tampoco logra ser una gran película de superhéroes o de super anti héroes.
Los sustos son relativamente convencionales, los giros bastante previsibles. Y en el desarrollo no tenemos claro si estamos ante un monstruo que quiere dominar el mundo, o ante un niño al que no se ha sabido educar y que trata de ocultar sus travesuras con desmanes aún mayores. Pero el director suple estas carencias con su clara conciencia de estar haciendo una película de serie B. Y se toma las libertades de ésta, ignorando las convenciones habituales de Hollywood. La violencia es muy explícita, por momentos casi de cine gore. Sin querer desvelar nada, cuidado con los cristales.
Michael Dallatorre ya había trabajado como director de fotografía con Yarovesky en The Hive. Aquí logra una atmósfera fría y gris, y consigue sensación de opresión incluso en los espacios abiertos. La ambientación también está lograda. Tirando de esa misma conciencia de serie B, el disfraz de nuestro antihéroe está construido con los restos de alguna prenda y un encordado de zapatillas de deporte.
La parte interpretativa es lo mejor de este film. David Denman, Kyle Breyer, es el perfecto padre trabajador que, aunque se inquieta por algunos comportamientos del hijo, deja estos asuntos en manos de Tori (Elizabeth Banks), la cual es una madre sobreprotectora que tiene tal pánico de perder a su hijo que no ve los problemas que se avecinan. La guinda la pone Jackson A. Dunn, Brandon, que está perfecto en su frialdad y falta de empatía, indiferente ante sus actos y ante el sufrimiento ajeno.
¿Estamos ante el nacimiento de un nuevo subgénero? ¿Es la primera película de una saga? ¿Quizá subyace una reflexión sobre la educación y la sobreprotección? ¿O sólo es una travesura de Yarovesky junto a los Gunn? Quizá el tiempo traiga la respuesta.
TRAILER
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