El libro de cocina de la señorita Eliza – Annabel Abbs – Editorial Planeta – 21.90 € – 416 páginas
La novela más reciente de la autora de La hija de Joyce, Annabel Abbs, se titula El libro de cocina de la Señorita Eliza y está editada de la mano de la editorial Planeta. Esta nueva ficción histórica es una oda a la gastronomía, a la amistad así como al proceso creativo. Ambientada en la época victoriana, te transporta hasta la cocina en la que las protagonistas hornean, además de la sororidad, deliciosos platos y te deleita con los sabores y aromas que salen de sus cazuelas, utilizando como aderezo algunos toques poéticos.
¿Cuál es el argumento?
A Elizabeth Acton no le gusta pasearse por las conocidas calles londinenses, comprarse hermosos vestidos, asistir a lujosos bailes o encontrar un marido adinerado e interesante que la mantenga y le consienta todos sus caprichos, no. Ella es muy diferente al resto de las muchachas de su edad. Tiene otras aspiraciones. Mejor dicho, un sueño. Una ilusión que, quizá, puede parecer algo alocada en esa Inglaterra de 1837, pero sus prioridades son las que son y no va a dejar de intentar llegar a ellas.
Se presenta en una prestigiosa editorial de la época y entrega el poemario en el que ha estado trabajando. No es la primera vez que lo hace, pues ya tiene uno publicado anteriormente, pero en esta ocasión quiere llegar al gran público, no solo a sus amistades. Y tiene confianza en lo que ha escrito. Sin embargo, la respuesta dada por el editor no es la esperada. En lugar de ofrecerle un nuevo contrato para la publicación de su obra, recibe una sugerencia extravagante. Algo que ni siquiera se le había pasado por la cabeza, y se niega siquiera a considerar.
La vida no siempre es fácil
Sin apenas darse cuenta, su vida cambia casi de la noche a la mañana. Su padre, un conocido señor de la alta sociedad que se codea con la élite y que hace negocios a diestro y siniestro, tiene problemas. Algunas de las transacciones que ha estado realizando no obtienen los resultados esperados y, acuciado por las deudas, decide poner tierra de por medio y huir del país. Se refugia en tierras galas dejando atrás sus deudas, sus amigos y su familia. Esta, totalmente desprestigiada, no tiene otra opción que vender gran parte de sus propiedades y moverse a otra zona, apartada de la gran ciudad, para continuar con su vida, lejos de las malas lenguas y los rumores que circulan a la velocidad del viento.
Hay que seguir adelante tomando nuevas decisiones
Las cosas se complican mucho para Elizabeth Acton y su madre. Hay que mirar hacia el futuro y decide reconsiderar todas las decisiones que ha estado descartando hasta ese momento. No le hace ninguna gracia, pero no le queda otro remedio que aceptar la proposición alocada que le hizo en su día el editor. No le atrae en absoluto la idea de escribir un libro de recetas. Es consciente de que apenas dispone de dotes para la cocina, pues de eso siempre se han encargado, en la alta alcurnia, las cocineras y los chefs extranjeros, pero no le queda otro remedio.
Renovarse o morir
Se remanga, coge algunos libros de recetas utilizados por sus anteriores cocineras, y comienza, poco a poco, a elaborar y cocinar platos. A veces salen mejor y otras veces peor, pero la cuestión es no rendirse. Haciendo uso de las especias, alimentos exóticos, frutas y verduras de temporada, carnes y ricos pescados, siempre con cuidado y bajo el férreo control de las cuentas por parte de su madre, las delicias que cocina empiezan a deleitar a todas las personas que deciden hospedarse en su nueva casa señorial. Y así es como El libro de cocina de la Señorita Eliza también va tomando forma. O, al menos, sus primeros borradores.
No se encuentra sola en esta nueva aventura
Sin embargo, Eliza no esta sola en esta nueva etapa de su vida. Mejor dicho, en esta nueva aventura de escritora y cocinera. Una de las primeras decisiones que toman a su llegada a Tonbridge es contratar al servicio. Y entre las personas que contratan, valga la redundancia, se encuentra Ann Kirby, una joven muchachita de familia humilde cuyo sueño es llegar a ser una buena cocinera. Entre las dos, poco a poco, irán cocinando además de deliciosos platos, una buena amistad (a pesar de provenir de distintas clases sociales) y un libro de cocina que pasará a la historia.
Sobre su autora: Annabel Abbs
Cursó estudios de Literatura Inglesa en la Universidad de East Anglia. Tras trabajar como consultora durante quince años, se tomó un descanso para criar a sus cuatro hijos antes e volver a su primera gran amor: la literatura.
Nombrada «una de las mejores novelistas histórica de la actualidad» por The Observer, su primera novela, La hija de Joyce, fue galardonada con el Premio Impress y el Premio Spotlight; Frieda: The Original Lady Chatterley fue elegida Libro del Año en 2018 por The Times.
El libro de cocina de la Señorita Eliza ha sido seleccionado como una de las mejores novelas del año por The New York Times y The Washington Post, está en vías de publicación en más de veinte países y también se prepara su adaptación televisiva.
Opinión personal sobre El libro de cocina de la Señorita Eliza
El chef catalán Ferrán Adriá ha dicho en más de una ocasión que, para él, «la cocina es un lenguaje mediante el cual se puede expresar la armonía, felicidad, belleza, poesía, complejidad, magia, humor, provocación y cultura«. Y esta es la frase que iba y venía a mi mente mientras estaba inmersa en la lectura de El libro de cocina de la Señorita Eliza. Y es que en esta nueva ficción de Annabel Abbs se pueden encontrar todas o casi todas las características descritas por el afamado cocinero.
Y es que es tal cual: Empezando por la armonía, una de las características principales de la ficción; continuando con la felicidad que otorga el trabajo bien hecho y conseguir los objetivos que se van marcando; ¿Qué decir de la belleza? la portada sólo es el aperitivo, pero los platos que continúan en forma de capítulos tampoco están mal; la poesía que desprenden las descripciones de sus elaboraciones, sensaciones y sabores que provienen del saber hacer de nuestras dos cocineras; la complejidad a la que te transporta la vida misma y hace que, en cuestión de poco tiempo, todo cambie; la magia de la amistad que no entiende de clases sociales; el humor que, aunque no impere en exceso, también se deja degustar en pequeñas cucharadas para aderezar algunos momentos; la provocación porque es un ingrediente más de este plato llamado vida; Y finalizando con la cultura. Sí, porque esta también se ve reflejada de diversas formas. Dicho esto, ¿no te parece, estimado lector, que El libro de cocina de la Señorita Eliza es el fiel reflejo de la descripción realizada por Ferran Adriá?
Y así, con este pequeño párrafo, es como arranco la opinión personal de esta nueva ficción de Annabel Abbs. Una novela histórica que, como avanzaba anteriormente, nos transporta hasta la Inglaterra de 1837 y nos adentra en la vida de la mujer que cambió los libros de cocina para siempre. No es una biografía sino más bien una ficción basada en una mujer que sorprendió a muchos. En ella se muestra también, de forma implícita, la sociedad victoriana, las expectativas que pesan sobre los hombros de las mujeres, y el destino de quienes no quieren seguir el decoro o quienes sólo aspiran a la emancipación, a otra vida.
Algunas características de la pluma de la autora
El libro de cocina de la Señorita Eliza es una novela muy bien hilada y trabajada. Escrita de forma cuidada, sutil y con detalle, consigue adentrarnos con facilidad en cada momento, lugar y pensamiento de los personajes.
Y es que, una escritura poética y rítmica, unos personajes entrañables, con algunos matices interesantes, un mensaje a la sororidad, la independencia de la mujer y, por supuesto, la codicia, entre otros aspectos, no hacen más que invitarte a dejar llevarte y sorprenderte. Y lo consigue a base de capítulos cortos y ágiles, y alternando los puntos de vista de Eliza, una poeta burguesa de carácter independiente, y Ann Kirby, su joven asistente, inteligente pero saturada por los dramas familiares y la pobreza.
Mis conclusiones finales sobre El libro de la Señorita Eliza
Imagino, estimado lector, que si has llegado hasta aquí te habrás dado cuenta de que he disfrutado de su lectura. Y, efectivamente, así es. Sin embargo, tengo que reconocer que no sería del todo sincera si no te confesara que el final me ha parecido como muy abrupto, rápido, como si la autora quisiera acabarlo cuanto antes.
Y la verdad es que me ha sorprendido un poco porque, en líneas generales y haciendo un símil muy cocinero, si me permites la licencia, la novela se ha ido cocinando a fuego moderado (igual que los platos que salen de la cocina de Eliza y Ann Kirby), consiguiendo que con cada una de las delicadas descripciones, las distintas personalidades de los personajes, los secretos o el deseo, en forma de deliciosos olores, consigan que al lector se le abra el apetito y quiera conocer si el postre será tan exquisito como los aromas que se han ido olfateando en el proceso de preparación y cocción. Y, a mí, personalmente no me ha acabado de convencer del todo.
Pero ya sabes, estimado lector, esto va de gustos y quizás a ti te encante. Ya sabes lo que dice nuestro sabio refranero español, «para gustos, colores«
Y para finalizar, solo resta decir que me ha gustado esta ficción de Annabel Abbs (a excepción de lo comentado) y que recomiendo su lectura.
Si te apetece lectu-transportarte, si me aceptas el vocablo, hasta la Inglaterra de de la década de 1830; si quieres descubrir cómo es la sociedad de esa época; si eres un amante de la gastronomía y quieres deleitarte con exquisiteces que salen directamente de la cocina o si quieres conocer más de cerca a la mujer que cambió los libros de cocina para siempre, El libro de cocina de la Señorita Eliza es lo que, en mi humilde opinión, deberías leer. ¿Te animas a ello y a compartir tus impresiones?
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