Tus veranos y mis inviernos – May Boeken – Grijalbo – 20.90€ – 592 páginas
La autora May Boeken ha sido uno de los grandes descubrimientos del año para mí, su novela Tus veranos y mis inviernos es la combinación perfecta de nostalgia estival, romance, drama y comedia. Es una lectura que adoré y que no quería finalizar, he tenido la oportunidad de decírselo a la autora y de que me contara más acerca de esta novela así como de sus próximas publicaciones. No te pierda esta preciosa entrevista en la que revivirás aquellos preciosos veranos de tu infancia
Buenas, May, es un placer saludarte, aunque ya hemos hablado personalmente me hace especial ilusión poder realizar esta entrevista. Según nos cuenta tu biografía has escrito diversos relatos durante toda tu vida pero no fue hasta 2018 cuando los publicas ¿Por qué no lo hiciste antes? ¿Qué es aquello que te frenaba para mostrar tus historias al mundo?
Siempre he escrito textos cortitos, pero nunca había llegado a desarrollarlos demasiado. Me entraba el cosquilleo, escribía, se lo pasaba a alguna amiga y lo abandonaba en un cajón. No es que hubiera nada que me frenara, simplemente era que no me veía escribiendo algo tan extenso como una novela. Hasta que un buen día, le envié uno de esos relatos cortos a una amiga (lo que hoy en día es el primer capítulo de Todas las malditas decisiones) y ella me exigió más. Si no fuera por ella, hoy no estaría donde estoy.
Ese año no publicas solo una novela sino una bilogía compuesta por Todas las malditas decisiones y Todas las benditas decisiones, ¿por qué tomaste la decisión de crear esa historia en dos partes? ¿Es mejor diferenciar en varios tomos que no en el mismo libro?
La bilogía Everlasting Wound tenía suficiente desarrollo y volumen como para partirla en dos, no fue algo premeditado. Pero vista mi trayectoria con las novelas largas, no era de extrañar que la primera saliera así de extensa también. Creo que es la historia quien te pide una extensión y una posible división. Hay veces que se ve claramente que la trama tiene un “parón” que permite partirla, otras veces en cambio, no es tan fácil.
Pero esas novelas culminaron en 2020 con la publicación del spin-off Todas las promesas que rompimos ¿sentías que necesitabas cerrar esa etapa con ese epílogo final o fue impulsado por lectores que como yo necesitamos más de personajes que nos han enamorado?
Totalmente. Creo que bien las lectoras y bien yo, necesitábamos ese epílogo que cerrara la serie. Soy muy de escribir secuelas, precuelas y cualquier cosa que se me ocurra sin salir del mismo universo, así que a veces es bueno poner un punto final para evitar posibles tentaciones XD Todas las promesas que rompimos fue mi manera de despedirme de Alemania.
Han transcurrido tres años desde tu última publicación, supongo que en ese tiempo habrás seguido escribiendo, no sé si sería tu boceto original pero cómo surge la que es tu actual novela Tus veranos y mis inviernos?
Sí, durante estos tres años he escrito dos novelas. Soy una escritora bastante lenta. Entre que trabajo en la idea, la planifico, me pongo, me paro, me pongo, me paro, reescribo, reviso… pasan los meses mientras mis amigas planean cómo matarme para que les dé más lectura. En cuanto a los manuscritos que terminé, uno de ellos, el Proyecto Nadie, descansa en un cajón a la espera de que lo revise y le dé un final, y el otro fue Tus veranos y mis inviernos.
La idea surgió de la manera más tonta, con un sueño. He sido campista desde los 3 años y un buen día mi madre me comunicó que ya no se sentían con fuerzas para seguir utilizando la caravana que teníamos, así que habían decidido venderla y pasarse a un bungalow. Eso generó una marabunta de recuerdos en mi cabeza, esa misma noche tomaron forma de novela en un sueño. Por la mañana, cuando se lo conté a una amiga, me dijo: tienes que escribirlo. Abandoné el Proyecto Nadie y en cuestión de 5 meses, Maider y Rubén se habían convertido en una realidad.
La novela narra la historia de Maider y Rubén, ambos se conocen desde pequeños porque ella va cada año al camping de Benicássim dónde la familia de Rubén es la propietaria, allí han cambiado peleas, rabietas, caricias y besos, una historia intermitente de la que es partícipe todo el mundo ¿Es parte del embrujo de la trama la nostalgia del verano? ¿Por qué siempre esa época evoca a amor?
No sé si es el verano como estación o los recuerdos que conservamos de los veranos que hemos vivido lo que nos hace pensar en el amor. Creo que la ambientación veraniega apetece en general, pero hurgar en nuestro propio pasado con historias que nos ayudan a evocarlo, apetece aún más. Por lo que me están transmitiendo las lectoras, muchas de ellas vivieron sus primeros amores en verano y la mayoría de ellas los recuerdan con cariño. Así que leer a Maider y Rubén se está convirtiendo en un viaje al baúl de los recuerdos.
Tus veranos y mis inviernos nos transporta por diferentes etapas y es que la historia se centra entre los años 90 y parte de los 2000, un periodo de cambios personales y emocionales que hace que conozcamos más de cerca a los personajes y sus decisiones ¿Consideras necesario poner bien en contexto a los lectores para entender el por qué de sus comportamientos? ¿Ha habido momentos en los que ellos han dispuesto más sus actitudes que tú?
Los 90 y los 2000 nos parece que están a la vuelta de la esquina, pero por desgracia, no es así (no hagáis la cuenta, porque es imposible que hayan pasado 33 años desde 1990). Por lo tanto, no está de más poner en contexto al lector sobre cómo eran las cosas por aquel entonces, porque son detalles que afectan a la relación de los personajes y a su desarrollo. Además, ambientar en esa época ha resultado tener dos vertientes: por un lado, las lectoras que ya lo han vivido y que inevitablemente lo recuerdan con nostalgia; y las que no, que alucinan con que viviéramos sin móviles, sin internet y sin otras muchas cosas.
La historia se centra en Maider y Rubén pero también entran en juego Nagore, Óscar y Xabi, ellos son parte del eje en el que gira la trama porque son los amigos de ellos y saben de antemano lo que ocurre con ambos pero ellos también tienen su propia historia, para ti ¿Quién crees que de ellos destaca en la “pandilla” quién sería el imprescindible? ¿Qué tiene de especial cada uno?
Para las lectoras el que más destaca es Xabi, un campista navarrico que lleva compartiendo veranos con Maider y Rubén desde niño. Es el típico personaje que empuja para bien, que está ahí para que los protagonistas se centren y hagan lo que deberían hacer. Es buen amigo y muy leal. Para mí, en cambio, Gemma me parece una pieza clave en la pandilla, es el nexo, es la que vive en Benicàssim y, por lo tanto, es la que siempre está en el camping. Además, es la típica amiga que mueve los hilos en la sombra y que siempre está preparada para brindarte su ayuda. Creo que es la más reflexiva y la que más entiende a Rubén.
Luego, tenemos a Nagore, que vendría ser el típico que personaje que también empuja, pero sin medir las consecuencias. Destaca por su manera de ser, abierta y un poco bruta, y también acaba siendo imprescindible, porque al final, siempre hace falta un personaje que suelte verdades como puños. En cuanto a Óscar, es un misterio, es el personaje que menos encaja en el grupo, pero a su vez, es imposible imaginar la pandilla sin él. Es el empanado, el que suelta las cosas cuando no debería, pero siempre sin malicia.
Tus veranos y mis inviernos es una historia pausada que tiene ese punto de comedia pero es más romántico, la novela hace que poco a poco quieras saber más y te involucra en la historia de tal manera que pareces parte de la trama ¿Tú también sentiste que eras parte de esa pandilla mientras la escribías? ¿Tiene algo de biográfico este libro?
Me sentí como un miembro más de la pandilla, ¡por supuesto! De hecho, a veces pienso que Nagore es mi manera de hacerme un cameo en la historia y poder opinar XD
He veraneado en un camping de Benicàssim casi toda mi vida, por lo tanto, todos los escenarios son reales, en cambio, todo lo que sucede en la novela es ficción.
Me ha gustado que la historia vaya a fuego lento, haciendo que cada vez se te encoja más el corazón. Ellos viven del recuerdo, de ese que anhelamos, recuerdan con gran alegría esas “primeras veces” ¿Pero ese amor es totalmente real o juega también un punto la ilusión de lo onírico? ¿Por qué decidiste hacer una historia tan intensa, pensaste en el “daño” emocional qué provocabas a tus lectores?
Maider y Rubén viven anclados en el recuerdo, echando de menos lo que tuvieron y sufriendo por la ruptura. Es una de esas historias de amor que, por mucho que sigas avanzando, nunca se superan. ¿Onírico? Tal vez para los que lo vemos desde fuera, pero para ellos no me cabe duda de que fue muy real. Escribir un amor así no fue premeditado, surgió. La verdad es que fue Rubén quien me guio, quien me fue dando las pistas y quien se negó a aparecer en los primeros capítulos. Pero una vez que lo hizo, tuve muy claro que estaba ante una historia de amor de las que se te quedan hincadas en el corazón.
Pero en esta historia de amor también tuvo un punto decisivo que lo marca todo, pero también es importante hacer mención a la distancia y es que vivían a kilómetros de distancia ¿Pero puede el amor “romper con todo” o es necesario que vivan alejados para de verdad valorar lo que quieren?
Mientras escribía la novela me planteé muchas veces esas cuestiones. ¿De no haberse roto su relación, hubieran soportado la distancia? ¿Su amor hubiera podido con eso? ¿O era la distancia la que lo hacía más especial? Al final, acabé llegando a la conclusión de que, en este caso, daba igual, su amor hubiera encontrado una salida.
Esta novela tiene casi 600 páginas pero es de esas que quieres continuar, que te es difícil olvidar por lo que sería necesario y casi es una exigencia que la novela tenga una continuación ¿Tendremos los lectores la oportunidad de seguir leyendo más sobre la historia de Maider y Rubén? (Y más después de ese final que te deja el corazón congelado), y si es así ¿Cuándo podremos leerla?
Habrá una continuación de la serie, ambientada en la misma época y localización, pero de momento no puedo decir mucho más (seguro que mi editora lee esta entrevista. Guiño, guiño), excepto que el protagonista va a ser bastante inesperado. Actualmente, todavía la estoy escribiendo y sí, sabremos más sobre Maider y Rubén, y ese detalle final que queda en el aire tendrá una resolución.
Supongo que la respuesta del público es tan entusiasta como la mía, pero ¿Te imaginabas ese amor tan grande hacia tus personajes? Sabes que en mi caso me provocaste ojeras por terminar la historia y dormir poco más de dos horas, eso es un halago hacia ti y tu manera de escribir ¿Por qué crees que hay tanta adoración hacia este libro?
¡Me encanta patrocinar ojeras! 😀
La verdad es que me resulta bastante complicado asimilar la cantidad de mensajes que recibo al día hablándome sobre la novela, porque nunca pensé que vería la luz. Para mí es una historia muy especial desde la primera palabra hasta el punto final, pero muchas veces el síndrome del impostor te hace ponerte en lo peor y estaba convencida de que jamás podría publicarla. Así que todos y cada uno de los mensajes que recibo me hacen una ilusión tremenda y son un empujoncito para que siga escribiendo. Ahora mismo, que estamos en pleno verano, me emociona mucho ver que la gente se lleva la novela a la playa, las fotos que me mandan del Mediterráneo o de Frigopies, incluso las lectoras que se están pasando por Benicàssim…
Ahora sé que estás inmersa en ese spin-off pero ¿seguirás dando rienda a los diferentes personajes de Tus veranos y mis inviernos o comenzarás una nueva etapa con otra historia independiente?
Soy famosa por no saber salir de los spin-off y escribir uno tras otro sin descanso, pero esta vez me he prometido que, a lo sumo, habrá tres historias en el universo del camping Voramar y después, retomaré los proyectos que tengo en el cajón o me pondré con algo completamente nuevo. Creo que trabajar en una misma serie es muy divertido porque es un terreno conocido en el que te mueves con soltura, pero también cabe la posibilidad de caer en una monotonía que no nos conviene (porque luego vienen los atascos). Pero ¿quién sabe? Soy una autora que escribe por impulsos…
Una vez que comienzas a escribir, debe dar vértigo el introducirte en una nueva historia, con personajes sin definir y también creo que con la reacción del público ¿Tú cómo vives ese momento? ¿Te da respeto el folio en blanco y más después del éxito de esta novela?
Hay dos momentos que me encantan a la hora de escribir: cuando me enfrento a la página en blanco y cuando llega la corrección. Esos primeros momentos cuando todo es posible los vivo con muchísima intensidad y me lo paso realmente bien. Me gusta mucho imaginar cómo será historia, cómo serán los personajes, los posibles escenarios, la trama, las subtramas… Las opciones son infinitas y puedo elegir lo que me apetezca. Suelen ser unos días en los que el móvil me echa humo porque no hago más que comentarlo con mis dos lectoras cero. En la fase de corrección me pasa un poco lo mismo, el molde está hecho, así que puedo disfrutar añadiendo, quitando, retocando…
Para mí el peor momento con diferencia, siempre es a mitad de camino. Es cuando me entra el vértigo y quiero abandonar la novela porque creo que voy a decepcionar a todo el mundo. No sé por qué me pasa en ese momento en concreto, pero nunca falla. De hecho, ya me lo tomo como un paso más en el proceso e intento no darle demasiada importancia. Miro la novela de reojo con rencor unos cuantos días y la retomo cuando se me ha pasado el perrenque.
Con Maider y Rubén también viví ese momento, me paré en seco y estuve días pensando que no merecía la pena seguir.
Una amiga me dijo una vez que, por mi manera de escribir, soy una autora que se “vacía” al teclado y que cuando me atasco, solo es cuestión de que me vuelva a “llenar”. Parece una tontería, pero según me voy conociendo más en mi faceta como escritora, empieza a tener todo el sentido del mundo.
El apoyo por parte de las redes sociales está siendo muy favorable, pero quisiera saber cómo es esa relación con ellos ¿Te gusta interactuar con los lectores? ¿Te ayudan ellos a saber cómo o qué querrían ver en tu siguiente proyecto?
Interactuar con mis lectoras es otra de las cosas que más me gusta hacer. Saber lo que sienten mientras están leyendo o conocer sus opiniones de primera mano no tiene precio. Obviamente no puedo comentarlo con cada una de ellas, pero si me surge la oportunidad y puedo, intento hacerlo. Suelen darme pistas sobre los aciertos y los fallos, y por supuesto me reclaman las historias que les gustaría leer en un futuro.
Nosotros desde la revista y yo personalmente recomiendo al máximo Tus veranos y mis inviernos, no solo como novela para el verano porque es ideal en cualquier ocasión del año pero tú como lectora ¿Qué nos recomiendas?
Siempre recomiendo lo mismo, pero es que no me canso: Tenéis que leer a Jennifer L. Armentrout en cualquiera de sus vertientes. Es una autora a la que admiro desde hace muchísimos años, para mí ella siempre es “casa”.
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