Desayunar en una isla mediterránea. La semana comienza en Fanfan con la visita a una fonda, denominación hostelera que ahora está en desuso pero que es término común de otras épocas no lejanas. Fondas las hay en el Viaje a la Alcarria de Cela. La Fonda Platé es eso, una fonda, un lugar amable donde se come bien, un lugar que cuesta dejar porque el desayuno es tan solo un pretexto para una buena conversación.
Si usted se acerca a Formentera, después del periplo imprescindible para llegar-a menos que usted sea un potentado y llegue en yate propio o alquilado-Como le digo…avión o barco, ferry desde Ibiza y alquiler de coche o motocicleta, se instala en hotel, hostal, casa turística o en casa de un amigo, los hay con suerte. Y a eso de las diez de la mañana sale dispuesto a conquistar esta isla que antes conquistaron monjes agustinos, piratas, árabes conquistadores (de todos ellos nos quedan vestigios). Aunque dicen algunas lenguas entendidas que algún romano despistado pasó por aquí. Ahora sus descendientes han reconquistado la isla y nos llegan a borbotones (bienvenidos sean) en cualquier mes…porque más de un 12% de los residentes son italianos.
Han dado las diez (lo dicen las campanas de la iglesia de Sant Francisco) y en pleno centro neurálgico de la capital se abren las puertas de la Fonda Platé donde los desayunos van acompañados de sonrisas de grandes profesionales, Rosa, detrás de la barra; Shirley y Sara bandeja en mano…en la trastienda o cocina Gladys y Begoña, su tortilla de patatas (con cebolla, claro) de esas que no necesitan acompañamiento, aunque un buen pan con tomate la complementa.
Desayuna antes de buscar una playa
De primero, para despertarse del todo, un buen zumo (los hay de lo que se imaginen) y un café (expreso en todas sus acepciones.) Tostadas a gusto del consumidor…a mi personalmente la de jamón y la de aguacate me apasionan. Con ese comienzo, sonrisa incluida, el día se hace más llevadero. Si el esfuerzo es simplemente buscar una de las muchas playas de esta isla, el desayuno te puede ayudar a sobrellevar el rigor del sol…
Pero Fonda Platé no se cierne exclusivamente a un buen desayuno…si te pillan las doce por allí; párate, siéntate a contemplar los ires y venires de muchos turistas, residentes, funcionarios, trabajadores, empresarios y otros especímenes. Los que van deprisa, los que no tienen prisa, los que han resuelto algunas cuitas, los que hacen cola en la Oficina de Atención o aquellos que no saben que hacer con su tiempo
Pídete una cerveza, un buen vino a copas y acompáñalo con alguno de los platillos que la pizarra de Roger (el chef), te ofrece para el aperitivo (muchas veces se convierte en comida, por aquello de más vale bueno conocido que…) y todo con una sonrisa incluida en el precio.
No les voy a cansar con las recomendaciones, porque como en cierto manjar, en Fonda Platé están buenos hasta los andares.
Precios razonables (no se olviden, estamos en Formentera) excepto la Coca-Cola…Ah, de las noches hablaremos más adelante…porque está de moda.