Viaje a Oxiana. Robert Byron. Edición e introducción de Giulia Gallini. Prólogo de Bruce Chatwin. Traducción de Antoni Puigrós. Editorial Confluencias.
«Cualquiera que sea aficionado a leer libros de viajes de los años treinta, a la larga deberá llegar a la conclusión de que Viaje a Oxiana de Robert Byron constituye la obra maestra de esta literatura». Lo escribe Bruce Chatwin, y lo deja ahí puesto, para el que se quiera enterar. Es más, Chatwin consideraba El viaje a Oxiana como un texto sagrado. En sus cuatro viajes a Asia central llevó un ejemplar. El mismo ejemplar. Es el último de los libros que escribió Byron, y es también su obra maestra. El viaje (1933) duró diez meses, en los que recorrió Persia y el Turquestán afgano, la región de Oxiana (por el río Oxus), hoy frontera entre Afganistán y la Unión soviética. El libro se publicó en Londres en 1937.
Una familia victoriana
El Byron que escribió El viaje a Oxiana era hijo de una familia victoriana, una familia excéntrica a juicio de Evelyn Waugh. Una familia venida a menos por la crisis de la Gran depresión, que antes de la ruina había tenido dinero para enviar a Robert a estudiar a Oxford. Consiguió un pobre diploma en Historia de tercera clase, una graduación sin honores. Sus amigos lo describen como un joven obstinado, excéntrico, provocador y porfiador. Le gustaba disfrazarse de reina Victoria. La imitaba, y aseguraba que su parecido físico con la reina era cercano a lo idéntico.
La afición por el disfraz le vino bien más tarde para entrar en algunas de las mezquitas de Asia central prohibidas para los infieles. Oxford intentó inculcar en Byron el gusto por la estética clásica de Roma y Grecia. A Robert le interesaba más Bizancio. Sus primeros viajes fueron a Italia y a Hungría. Luego recorrió Europa en coche hasta Atenas. Ese fue el origen de su primer libro: Europe in the looking glass (Europa en el parabrisas) publicado en 1926. El punto de inflexión en su carrera literaria son los viajes al monte Athos. Byron no era un erudito, pero tenía una inteligencia aguda y un gran sentido del humor y de lo cómico. En su segundo viaje a Athos el relato se centra en la habilidad de los monjes para timar a los extranjeros. Byron era escritor, también fotógrafo.
El viaje a Oxiana
En 1933, Robert Byron emprendió un viaje a través del Medio Oriente, por Beirut, Jerusalén, Bagdad y Teherán hasta Oxiana, el país de los Oxus, el antiguo nombre del río Amu Darya, que forma parte de la frontera entre Afganistán y la Unión Soviética. Byron busca fotografiar las mezquitas y las obras de la arquitectura islámica, en un momento en que la región era inaccesible para la mayoría de los viajeros occidentales. El viaje de Byron abrió el apetito de toda una generación de lectores, a los que persuadió por su estilo y su capacidad descriptiva.
Byron acumula y ordena materiales diversos, ordenados en forma de diario. Paul Fussell escribe que «leer el libro es como tropezar con un museo moderno vigilado por un tipo benigno y excéntrico. Los viajeros de sillón encontrarán recortes de periódicos, carteles públicos y avisos, formularios oficiales, cartas, anotaciones en el diario, ensayos sobre política actual, pasajes líricos, disertaciones históricas y arqueológicas, breves narrativas de viajes (generalmente de desastres espantosos y ) y, el triunfo del libro, al menos veinte cómicos excelentes».
Byron dramatiza los diálogos y les añade, como si se tratara del libreto de una opereta, anotaciones musicales, desde el forte al fortissimo. Fussell añade que lo que Ulises de Joyce es para la novela de entreguerras El viaje a Oxiana lo es para los libros de viajes. Una gran obra maestra que el lector de literatura de viajes solo puede celebrar, y el aficionado al humor, también. Byron murió en 1941. El barco en el que viajaba a Egipto como enviado especial para la prensa británica fue torpedeado por un submarino. No hubo supervivientes. Su cuerpo nunca se encontró.
Fanfan y Ludiana te mantienen al día de las novedades en entretenimiento, y te ofrecen servicios de comunicación y herramientas estratégicas para gestionarla. Si quieres estar al día de la actualidad de FanFan y enterarte antes que nadie de todo lo que publicamos, síguenos en nuestras redes sociales: Facebook, Twitter, Instagram, Ivoox, Spotify y YouTube.