Estuve aquí y me acordé de nosotros. Anna Pacheco. Editorial Anagrama
‘Estuve aquí y me acordé de nosotros’ se centra en analizar las relaciones laborales de los trabajadores del sector de los hoteles de lujo de Barcelona. Decido leer este libro porque vivo en una isla que vive del turismo. Sin embargo, en los últimos años, los problemas derivados de esta actividad económica no dejan de multiplicarse.
Anna Pacheco, nacida en 1991, es periodista y escritora, y ha escrito un libro que se lee con la facilidad e interés de un Caparrós, una Guerriero, un Carrión, para pensar y repensar el turismo.
El libro empieza con una reunión de trabajo en la que el ponente intenta imponer la concepción ideológica del hotel a los trabajadores, de modo que sus aspiraciones sean la mejor manera de esclavizarlos. Para acabar de cerrar el ciclo virtuoso es una ONG la que se encarga de certificar la sostenibilidad y ecología del hotel. Una ONG formada por hoteleros.
Otro de los temas que trata el libro es el de las abundantes horas extra que realizan los trabajadores del sector. Un problema que no parece tener visos de resolución.
El libro nos habla de una concepción del turismo como algo deseable, como la aspiración más alta a la que puede aspirar la masa de ciudadanos, para luego indagar en la autopercepción de sí mismos de los trabajadores que realizan los trabajos peor pagados del hotel. Naturalmente, casi nadie se considera clase baja. Los modos de autoengañarse son diversos. Aquí hay dos opciones fundamentales: el que se revuelve creyendo en la figura del hombre hecho a sí mismo y los que aceptan las cosas como son y se limitan a sobrevivir.
Nos acercamos al final del libro y aparece otro tópico empresarial: las cenas de Navidad y los regalos, con sus discursos motivacionales sacados de uno de esos libros que venden en los aeropuertos sobre quesos, gacelas y el secreto de la felicidad.
Para acabar, el libro plantea si es posible realizar un turismo de proximidad, un turismo comunal. En Menorca había algo así hasta hace unos pocos años en la isla del Lazareto. Para funcionarios de la Seguridad Social. Era percibido por la ciudadanía como un privilegio. Supongo que el motivo por el que se acabó con este modelo fue porque el Ministerio no invertía en reformas y no quería hacerlo.
En el libro hay una referencia al concepto de ciudad vertical y apunta a la existencia de un estudio donde no se estigmatiza. Donde vivo, los hoteles están mal vistos por el impacto paisajístico y visual, pero lo cierto es que construir en superficie el mismo número de plazas turísticas consume cantidades ingentes de territorio.
El libro de Pacheco es una muy recomendable pequeña maravilla para repensar nuestras ideas sobre el turismo.