El pintor de almas es la nueva obra literaria de Ildefonso Falcones, el autor que saltó a la fama con La Catedral del mar . La Catedral fue un éxito literario, acompañado después por un triunfo audiovisual cuando Antena 3 la llevó a la pantalla. Netflix le dio después un impulso global. Con El pintor de almas, Falcones vuelve a la novela histórica con un gran tema, una gran época, y un gran personaje.
Los comienzos siempre son duros
Barcelona, principios del siglo XX. Esta es la referencia histórica del relato, una novela que nos presenta, como protagonista principal, a Dalmau Sala, un joven de familia humilde cuya única pasión es pintar. Trabaja como ayudante de Don Manuel. Fabrica azulejos de cerámica. Emma es su novia, su apoyo en todas las decisiones importantes de su vida.
Los Sala no son una familia convencional. En su casa no entra el Dios de los cristianos. Tomás Sala, el padre de Dalmau perdió la vida al intentar cambiar la sociedad. Doña Josefa vive en el temor de que vuelva a ocurrir lo mismo, porque sus ideales no han cambiado, y la sociedad tampoco.
Pero ahí está Montserrat, la hermana de Dalmau, un ser libre, honesto, valiente que se pone “el mundo por montera” con tal de defender sus creencias. Gracias a su acción y a su coraje la familia da un giro, un cambio de rumbo, que afecta a todos, incluida Emma.
En la búsqueda del “yo”
Tras la disputa de Montserrat por defender los derechos de los trabajadores para que redujeran su jornada laboral a 8-9 horas, empieza una nueva etapa en la que todo cambia. Emma se aleja de la familia Sala, Dalmau empieza a ser un prestigioso artista; sin embargo, lo que podía ser el culmen del éxito es todo lo contrario, ya que Josefa está sola, no tiene a su marido, ni a su hija y los demás miembros la abandonan por diversos motivos. El declive de la familia Sala ha comenzado y esto unido a manifestaciones sociales de la época hace que todo cambie y empiece a coger un nuevo destino para todos.
Emma quiere rehacer su vida lejos de Dalmau, pero el pasado es poderoso y como un imán siempre acaba unida a los Sala, pero todo cambia cuando aparece en su vida Antonio, un albañil, el cual es la némesis de Dalmau por lo tanto, el mejor remedio para alejarse de él y de hecho Antonio le da algo que cambiaría la vida de Emma por completo.
Todo suma y todo resta
A pesar de la extensión ya que tiene alrededor de 700 páginas, El pintor de Almas es una novela amena que nos lleva a recorrer la ciudad de Barcelona en uno de los momentos más destacados de su historia, desde el nacimiento de La Sagrada Familia gracias a la relación del protagonista con Gaudí, o la construcción del hospital de la Santa Creu i Sant Pau de Domènech. Otros lugares como La casa Lleó Morera, La casa Terrades de Puig i Cadafalch o el Park Güell son otros de los lugares emblemáticos que conocemos a través de la novela.
El pintor de Almas comienza su andadura en 1901 y finaliza en 1932, más de 30 años de diferencia en los que la ciudad de Barcelona se encuentra en un periodo de cambios, revoluciones y arte que Ildefonso Falcones explaya de manera majestuosa en este libro. Esta novela es un culmen de sensaciones porque la historia que hay detrás de Dalmau, Emma, Josefa, Montserrat es el reflejo de una sociedad que luchó por ser libre y por vivir como quería y no según la imposición. Por lo tanto, si tenéis la oportunidad, no dudéis en leerla. Ildefonso Falcones no defrauda.
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