Bajo la piel – Susana Rodríguez Lezaun – Editorial HarperCollins – 18.90€
Susana Rodríguez Lezaun vuelve a deleitar a los amantes del género noir con su nueva ficción. Se titula Bajo la piel y es de esas historias que no defraudan. Está brillantemente escrita e hilada y nos descubre a una protagonista fascinante llamada Marcela Pieldelobo. Sin duda, una apuesta más que segura para todos los que disfrutamos con este tipo de lecturas.
¿Cuál es el argumento?
Aparece un coche siniestrado que ha caído por un pequeño terraplén, a las afueras de Pamplona. Sin embargo solo se encuentra eso. Ni rastro del conductor ni de ningún documento que pueda dar una pista de la persona que lo conducía. No parece haber nadie en los alrededores y, por tanto, ningún testigo que pueda ayudar a esclarecer los hechos.
Marcela Pieldelobo, la inspectora a la que se le ha asignado el caso, acude al lugar del siniestro. Tras echar un rápido vistazo, a un lado y otro, se da cuenta de que en el asfalto hay algunas indicios que demuestran que han sacado al vehículo de la carretera, pues no son pocas «las señales de frenadas, acelerones y trozos de cristal» que se van encontrando. Y, aunque al principio, pensara que le podían haber degradado en su trabajo, pronto se dará cuenta de que hay más, mucho más.
Desaparición de una mujer y aparición de un bebé abandonado
La inspectora sigue indagando. Necesita respuestas a todas las preguntas que le van surgiendo. Y estas parecen multiplicarse ya que la persona que conducía el coche, una alta ejecutiva de una gran empresa, está en paradero desconocido. Además, y por si fuera poco, aparece un bebé de muy pocos meses abandonado detrás de una solitaria construcción circular bastante alejada de la ciudad. Está segura de que todo está relacionado, pero no sabe cómo ni por qué.
Todas las evidencias que va hallando apuntan a un mismo lugar, pero no son concluyentes y dificultan mucho las cosas. El poder y las influencias de algunas personas involucradas, de una u otra forma, logran que vuelva a sacar a esa mujer indomable y poco dada a seguir las órdenes de sus superiores que lleva dentro para buscar toda la verdad. Hay que encontrar al culpable y no va a parar hasta detenerlo. Cueste lo que cueste. Pese a quien le pese.
Marcela Pieldelobo no pasa por un buen momento personal, pero nada le detiene
El superior de la inspectora decide apartarla del caso ante las presiones que recibe. Pero ella, como buena profesional y perseguidora de la verdad que es, decide no rendirse. A pesar de no estar pasando por su mejor momento personal (acaba de fallecer su madre y, además, aparece su padre, un maltratador de manual), insiste en que su trabajo es el que es y su deber es seguir adelante.
Sobre la autora: Susana Rodríguez Lezaun
La autora (Pamplona, 1967) es periodista, licenciada en Ciencias de la Información por la Universidad del País Vasco. Ha trabajado en varios medios de comunicación a lo largo de su carrera hasta que, en el año 2015, publicó su primera y exitosísima novela, Sin retorno, un thriller ambientado en Navarra al que siguieron Deudas del frío (2017) y Te veré esta noche (2018). Con su siguiente novela, Una bala con mi nombre, esta vez ambientada en Boston y publicada por HarperCollins, ha seguido cosechando un gran reconocimiento de crítica y lectores.
Opinión personal sobre Bajo la piel
Como ya sabrás, estimado lector, normalmente comienzo mis reseñas con una o varias frases célebres que, en mi humilde opinión, reflejan muy bien el tema, su espíritu, algunos de los aspectos centrales de las lecturas y/o parte de las personalidades de los protagonistas. Y en esta ocasión no iba a ser diferente.
Bajo la piel de Susana Rodríguez Lezaun está tan magníficamente ideada, hilada y construida que se convierte en un universo en el que es muy fácil adentrarse y del que es muy difícil alejarse, y creo que en parte es por Marcela Pieldelobo, su protagonista. Y mi frase célebre de hoy va dedicada a ella, al «alma» de esta ficción. Y es que, es una mujer fascinante con una personalidad tan propia que le da igual «ir en contra de la corriente aunque sepa que acabará astillándose«.
Sí, si eres seguidor del escritor estadounidense Augusten Burroughs, es posible que te hayas dado cuenta de que su frase ha sufrido una pequeña variación, pero también sabrás que es mínima. Solo espero que me permitas esta pequeña licencia. Te confesaré que me he estado debatiendo entre varias frases más, pero esta me ha parecido una de las más acertadas pues creo que es una de las máximas de nuestra protagonista. Y es que creo que capta a la perfección su esencia. Ella es así. Solo quiere hacer su trabajo y encontrar la verdad (investigar esas desapariciones, esos asesinatos y encontrar al culpable), sin pensar en nada más, sin atender a los requerimientos de sus superiores y yendo «en contra de la corriente«. Llegando incluso, como bien dice la frase, a «astillarse«, en el sentido más amplio de la palabra.
Pero Bajo la piel no solo es Marcela Pieldelobo, no, sino que es mucho más. Y solo hay una manera de poder descubrir todo lo que encierra: ¡leyéndola!
Características principales de la pluma de la autora
Una vez más, la autora vuelve echar mano de algunas de las características a las que nos tiene acostumbrados: capítulos cortos, una escritura ágil, amena y cuidada, descripciones precisas y Pamplona como escenario, aunque no es el único pues, en esta ocasión, también, nos transporta muy brevemente a Biescas (lugar donde ha nacido y vivido su infancia la protagonista) y a Zugarramurdi (donde está su refugio, su pequeño paraíso).
Susana Rodríguez Lezaun es una contadora nata de historias, y con este nuevo thriller lo vuelve a confirmar. Como decía anteriormente, es fácil adentrarse en el universo que ha creado, desde el principio, y que te atrape hasta el final. Y es que con frases como «…. El vehículo que la seguía ya había intentado dos veces sacarla de la carretera. Durante un instante fugaz pudo ver el odio y la inquebrantable decisión en los ojos de quien conducía, y supo que estaba a punto de morir. Y su hijo también«, ¿a quién no le despertarían interés por devorarlo de cabo a rabo?
Se ha vuelto a servir de otro recurso que ha ido utilizando, sobre todo, en las novelas que componen su trilogía: plasmar a la perfección algunos aspectos de la realidad social, entre los que se encuentran el poder y todo lo que se puede llegar a hacer para mantener el status, la superioridad que algunas personas de la élite creen tener sobre el resto, el tráfico de influencias, la dejación de funciones por parte de algunos profesionales, el maltrato… En algún que otro momento sientes cómo se te descompone el cuerpo al ver cómo se relatan algunos momentos en los que se ponen de manifiesto algunas de las citadas realidades. Y todo ello provoca emociones y sensaciones en el lector. Sí, en ti y en mí. En algunas ocasiones son positivas, en otras no tanto, pero son emociones al fin y al cabo. Y eso es lo importante, que además de disfrutar de la lectura consiga conmoverte.
¿Cómo son los personajes?
Auténticos y reales. Se empatiza muy bien con cada uno de ellos y algunos de ellos son de los que te dejan huella por su forma de ser, su perseverancia, su forma de pensar, de actuar o por su infinita paciencia. Sin embargo, permíteme que te hable de Marcela Pieldelobo porque, en mi humilde opinión, es «su novela». Y, como ya te habrás dado cuenta, así lo he enfocado desde el principio.
Y es que Marcela Pieldelobo, nuestra protagonista, es una mujer fascinante. Tiene las cosas claras y no se anda con chiquitas. Sabe lo que quiere y cómo lo quiere, y no para hasta conseguirlo. Sus objetivos son los que son y como es fiel a sus principios no descansará hasta llegar a ellos, aunque a veces tenga que saltarse las normas o las órdenes. Sorprende su curiosa afición hacia los conceptos y datos absurdos así como su extravagante tatuaje. Haciendo honor al significado de su nombre (relativo al dios Marte y cuya virtud es la fuerza) es fuerte, muy fuerte. Y también es valiente, tiene coraje, astucia e inteligencia, igual que los lobos. Características que curiosamente coinciden con su apellido, ¿no crees? Y con este pequeño detalle queda patente que la autora no deja nada al azar y que todo, absolutamente todo, está milimétricamente pensado.
Es cierto que hay más personajes, por supuesto. Su compañero de trabajo, el subinspector Bonachera, con el que tan bien se lleva, ese amigo con derecho a roce que tanta paciencia tiene y tan bien le cuida o ese otro amigo, vecino y «guardián» que tan pendiente está en «su particular refugio» (en Zugarramurdi), entre otros, también tienen su importancia, en mayor o menor medida, dentro de la ficción. Y dicho esto, ¿no te ha entrado curiosidad por conocerlos?
Conclusiones finales sobre Bajo la piel
Como te habrás dado cuenta, estimado lector, Bajo la piel de Susana Rodríguez Lezaun tiene todos los ingredientes necesarios para pasar un buen rato y disfrutar de su lectura. No le falta ni acción ni misterio. Ni amistad ni momentos más románticos. Tampoco escasean la intriga o el suspense. Y la suma de todo ello consigue que no te deje indiferente. Y por todo ello, como no puede ser de otra manera, recomiendo encarecidamente su lectura.
Si te apetece descubrir qué le ha pasado a la señora García de Eunate y por qué, y quién está detrás de todo ello; o si eres de los que les gusta la acción, las emociones fuertes y quieres encontrar la verdad cueste lo que cueste, acompaña a Marcela Pieldelobo y hallarás todas las respuestas. ¡Te encantará!
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