Presentación de la serie producida por Ben Affleck y Matt Damon, emitida en Movistar+
La serie City on a Hill, producida por Ben Affleck y Matt Damon, está interpretada en sus papeles principales por Kevin Bacon («Mystic River», «I Love Dick») y Aldis Hodge («Figuras ocultas», «TURN») como Jackie Rohr y Decourcy Ward, respectivamente.
Nos centramos en el Boston de 1992, en un contexto de policías corruptos y racistas que no luchaban contra la violencia, asentada en la maquinaria de las instituciones de la ciudad .
A Boston llega para trabajar como fiscal del distrito Decourcy Ward (Aldis Hodge), que se topa con un veterano corrupto del FBI, Jackie Rohr (Kevin Bacon).
Aunque al principio chocan, porque mientras uno actúa con la ley como máxima, el otro está acostumbrado a aprovechar su experiencia y conocimientos del funcionamiento policial y judicial para sus propios intereses, después llegan a una especie de pacto para trabajar juntos en el caso de una familia de ladrones de coches blindados en Charlestown.
Su labor parece que supone el inicio del llamado “El milagro de Boston», que hizo descender el índice de criminalidad drásticamente.
Completan el reparto Kevin Dunn («Veep», «Código negro»), Jonathan Tucker («Kingdom»), Mark O’Brien («Halt and Catch Fire»), Kevin Chapman («Brotherhood»), Jill Hennessey («Crossing Jordan») y Lauren E. Banks («Maniac», «Instinct»).
La dirección corre a cargo de Michael Cuesta y Gavin O’Connor.
‘La noche que Flynn’ envió a los policías al hielo, el expresivo primer episodio de ‘City on a hill’
En el primer episodio, aparte de lo ya comentado, el encuentro entre Ward y Jackie, se nos adelanta un poco el estilo de la serie. Vamos a vernos las caras con policías con dobles vidas, con asaltos, con el dinero como máximo objetivo y con trapos sucios aquí y allí.
Además, la mayoría de los policías y agentes secretos y no secretos, abogados y gente del sistema judicial se conocen entre ellos. También es cierto que se tiene la sensación de que se quiere acabar con la situación de corruptela, aunque nadie se decide claramente a ello.
Por otra parte, se ve la distinta vida que parecen llevar Jackie y Decourcy, aunque puedan compartir en algún bar un vaso de whisky.
Nos hemos quedado con la máxima expectativa de ver si estos “sabuesos” van a saber parar a la familia criminal organizada que ha comenzado a atracar vehículos blindados.
Pero eso será en los siguientes episodios.
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