Francia apenas pone limitaciones a los viajeros, salvo las lógicas medidas de seguridad y se convierte en un destino ideal por sus muchos atractivos. De Francia puede decirse lo mismo que los italianos cuentan de Sicilia, Dios la hizo tan bella que tuvo que equilibrarla creando a los sicilianos… Ironías aparte, Francia es siempre un buen destino por su naturaleza, su cultura, su arquitectura y su gastronomía. Aquí van 10 sugerencias para una escapada de otoño.
Navegar por el Canal du Midi
Creado en el siglo XVII el Canal del Midi —o Canal Real del Languedoc, como se le conocía originalmente— sigue siendo considerado hoy en día como una extraordinaria obra de ingeniería y diseño. Se extiende a lo largo de 240 km desde Toulouse hasta el estanque de Thau, en el Mediterráneo. Es posible recorrerlo al timón de una embarcación alquilada, atravesando el túnel de Malpas, bajo el puente-canal de Béziers, y la ciudad fortificada de Carcasona. En las riberas del canal se despliegan los campos de cereales del Lauragais hasta las estribaciones soleadas de las Corbières y el Minervois. Hileras de plátanos, pinos piñoneros y cipreses dan sombra al curso de agua, a lo largo del viaje.
Descubrir los nenúfares que inspiraron a Monet
El cautivador mundo de Claude Monet en Giverny queda desvelado en fondation-monet.com. Enclavado en el Eure, en el corazón de Normandía, este paisaje floral fue la inspiración de algunos de los cuadros más notables y evocadores del artista. Alfombrado de tulipanes en primavera y repleto rosas en verano, los senderos de Giverny, el cenador cubierto de flores y la cambiante paleta de colores, han llamado la atención de generaciones de amantes de la naturaleza y aficionados al arte
En bicicleta por el Valle del Loira
Una de las rutas ciclistas más populares y largas de Francia, La Loire à Vélo abraza el emblemático río Loira a lo largo de los 900 km que separan Cuffy (Centro-Val de Loire) y Saint-Brévin-les-Pins (Pays de la Loire). Un recorrido para disfrutar del deporte y de castillos históricos y jardines así como de pueblos rodeados de viñedos y de una gastronomía de primera clase. Los 300 km que unen Sully-sur-Loire, en el Loira, con Chalonnes-sur-Loire, en Anjou, son sin duda uno de los tramos más bellos de la región, que incluye desde cuevas y mansiones de piedra caliza hasta islas enclavadas en los brazos del río.
1.500 kilómetros en bici al borde de la costa
Un viaje inolvidable es el que puede hacerse por la nueva ruta ciclista Vélomaritime. Inaugurada en junio de este año, la ruta se extiende a lo largo de más de 1.500 km. de costa
desde Bretaña hasta Bélgica, con una amplia red de senderos salvajes y paisajes hasta ahora inaccesibles para los entusiastas del ciclismo. Espectaculares cabos, dunas, acantilados, monumentos y otros tesoros arquitectónicos hacen de la Vélomaritime la ruta ideal ideal para que los amantes del aire libre, disfruten también de la Historia y la gastronomía. Repartidos entre Roscoff y Dunkerque hay cinco Grands Sites de France, entre los que destacan la Bahía de Somme, los gemelos Cap Gris-Nez y Cap Blanc-Nez y los acantilados ventosos de Étretat; tres de los Plus Beaux Villages de Francia; cuatro monumentos nacionales y tres lugares emblemáticos incluidos en la lista de la UNESCO, como el Mont-Saint-Michel. Una ruta que además, cuenta con 50 potentes faros.
Descubrir el eterno enigma de Carnac
Erigido en torno al 6.000 a. C. a lo largo de la escarpada costa de Bretaña, este denso conjunto de 3.000 piedras erguidas sigue desconcertando a los arqueólogos de todo el mundo. Las teorías sobre su origen y significado abundan. Aunque nadie ha descubierto la verdad, se cree que sirvieron como una especie de espacio funerario sagrado. menhirscarnac.fr/es es el lugar para dejarse sorprender por los inescrutables gigantes de granito de Carnac.
Visitar el refugio secreto de María Antonieta
Abandonado a la ruina durante casi dos siglos antes de ser restaurado en 2018, el Hameau de la Reine sigue siendo uno de los secretos mejor guardados de Versailles. Construido entre 1783 y 1786, esta aldea modelo enclavada en el dominio del Petit Trianon fue el refugio de María Antonieta de las miradas indiscretas de la Corte y de sus intrigas. En este idílico lugar, María Antonieta cumplió su deseo de llevar una vida más sencilla, representando una versión idealizada de la vida en el campo. El paraje incluye un lago artificial salpicado de casitas con entramado de madera, un molino de viento ornamental, un faro, un lavadero levantado sobre pilotes y una lechería, además de la Casa de la Reina, impecablemente renovada y amueblada. Merece la pena visita de la capilla real, cuya fachada recién acaba de ser restaurada https://es.chateauversailles.fr/
La batalla de Verdún con una nueva perspectiva
La Ciudadela Subterránea de Verdún, recientemente acondicionada para el siglo XXI, ofrece una imagen aún más emotiva del enfrentamiento más largo y sangriento de la Primera Guerra Mundial. Una nueva exposición de realidad aumentada, con pantallas interactivas, paisajes sonoros y paseos en vagón, ofrece una vívida imagen del decisivo papel logístico del complejo secreto durante la batalla de Verdún. Una ciudad autentica ciudad subterránea, que albergaba no solo una red de salas de guerra y oficinas, sino inmensos dormitorios para las tropas, depósitos de pólvora y municiones para abastecer el frente, una capilla, una enfermería y una panadería que suministraba entre 30.000 y 40.000 raciones al día. 1.500 hombres trabajaban y vivían en la ciudadela y hasta 4.000 pasaban por sus galerías.
Baño de cultura en Marsella
El primer museo subacuático de Francia acaba de abrirse en Marsella. Desde este verano, los bañistas, buceadores y submarinistas pueden zambullirse en la galería sumergida del Museo subacuático y contemplar gratuitamente sus 10 esculturas ancladas en el fondo marino a 100 metros de la Playa de los Catalanes. Este museo sumergido tiene como objetivo sensibilizar sobre los problemas medioambientales y proteger los ecosistemas marinos
Saborear Córcega, una isla muy sabrosa
Desde la charcutería y el queso hasta los postres tentadores la despensa de Córcega está bien surtida y se une a los muchos encantos de la isla. Los amantes de la carne se sentirán como en casa en el país del cerdo. Desde el figatellu (salchicha de cerdo) y la coppa (cerdo curado) hasta el lonzu (filete de cerdo curado y ahumado), los corsos saben muy bien qué hacer con un cerdo. El brocciu, un queso redondo elaborado con leche de oveja o de cabra, es la estrella de la isla y es el ingrediente central de innumerables especialidades locales, entre las que destacan los beignets de brocciu y el fiadone, la versión de Córcega de la tarta de queso y uno de sus postres más deliciosos
El chucrut una reconfortante receta para el otoño
El chucrut no falta en las mesas de otoño e invierno de Alsacia. La leyenda cuenta que el chucrut fue inventado por los constructores de la Gran Muralla, que enterraron la col bajo la nieve para conservarla, donde fermentó. Los hunos acabaron introduciendo la col fermentada en Alsacia en el siglo V. Los alsacianos no perdieron el tiempo y la mezclaron con embutidos, y así nació el chucrut tal y como lo conocemos. Para probarlo en todas sus variedades, nada como recorrer la Route de la Choucroute a lo largo del Bajo Rin
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