Malibú Renace – Taylor Jenkins Reid – Umbriel Editores – 17,00€ – 380 páginas
Taylor Jenkins Reid se ha convertido en una referencia literaria tras la publicación de Los siete maridos de Evelyn Hugo, ahora con Malibú Renace se asienta ese título por su delicada y expresiva prosa, haciéndonos partícipes de una historia de salvación y redención, donde cada personaje tiene su propia batalla interna e intenta superarla, poniendo su propia vida en juego. Un libro escrito en diferentes épocas, que hace que la novela tenga un toque muy personal y cálido
Sinopsis inicial
Agosto de 1987, como cada año la familia Riva realizaba en su casa de Malibú una mítica fiesta en donde acudía lo más granado de la sociedad, y no era para menos y es que Nina era una famosa modelo y sus hermanos Jay y Hud eran respetados y aclamados surfista y fotógrafo respectivamente. Todos querían estar cerca de esta icónica familia, de la que también formaba parte la pequeña Kit, además de estos fabulosos títulos, tenían uno más, el ser hijos del mítico rockero Mick Riva. A pesar, de toda esta posible expectación, Nina no quería que llegase la hora de la fiesta, estaba exhausta y más después del escarnio público al que había estado sometida por culpa de su marido, pero tendría que poner buena cara y enfrentarse a todo, como había hecho siempre.
Jay y Hud para el resto del mundo eran mellizos, pero ellos sabían que no. Tenían una complicidad muy evidente y por eso no querían dañar esta especial situación, pero era complicado cuando uno de ellos había empezado a salir con la exnovia del otro. Se lo tenía que contar, pero nunca era un buen momento, quizás en la fiesta fuera una buena oportunidad pero sabía que decirlo complicaría las cosas, lo único que quedaba claro es que esa fiesta sería un punto de inflexión en sus vidas. Y es que la mañana siguiente, esa icónica mansión será polvo, un incendio asolará su hogar y en él se quemarán recuerdos, vivencias y secretos, pero habrá otros que se guardarán dentro de ellos mismos. Ese final será el inicio de sus vidas, pero como todo es mejor empezar por el principio.
Tres décadas atrás
En 1956 y con tan solo diecisiete años June Costas conoció a Mick Riva, este prometía ser cantante y ella le apoyaba en esa decisión. En ese momento Malibú, era solo un pueblo de pescadores y ella trabajaba sin descanso en el restaurante que regentaban sus padres, su única herencia y su cruel condena. Ella aborrecía ese lugar, pero no tenía más oportunidades de triunfar, por lo que asumía su vida tal y cómo le habían planificado, pero el conocer a ese joven y encantador chico le fascinó, con él aprendió a ser feliz y a vivir de manera diferente. Mick Riva se convirtió en poco tiempo en su marido y con él viviría una red de sensaciones auténticas y voraces, que harán que su vida se trastoque en varios momentos.
Mick Riva despegó en su carrera como cantante y ahí estaba June, pero la vida ya no era como entonces, sus planes de vida habían cambiado, ya no estaban solos y el perdón a través de palabras, no era ningún consuelo. June aprendió de los errores, cometió otros pero siempre fue el reflejo y consuelo de sus hijos, unos niños que han vivido en el lujo, la pobreza, el rencor, la soledad y el amor, y es que esta novela es un vaivén de emociones, donde la pieza clave es la comprensión y el respeto. Para conocer la vida de los hermanos Riva, hay que adentrarse en la vida de sus padres June y Mick, que son realmente los auténticos protagonista de la novela.
Mi valoración personal
Malibú Renace es desde mi punto de vista mejor que su antecesora Los siete maridos de Evelyn Hugo, tiene ese punto de humanidad y realismo que nos hace ver una novela sin complejos, sensible, emocional pero con un toque de fantasía real. Sin duda para mí, la descripción de June como personaje es la más completa de todos, siendo ella la gran estrella de la obra. Es su vida la más interesante, en la que más se ahonda y se aprende. Mick también es un personaje bastante recurrente pero que odias en algunos momentos por su franqueza y actitud, y eso también hace grande a la autora por su buena manera de describir a los personajes.
En relación a los hermanos Riva aprendemos más de ellos en su infancia y adolescencia que en la etapa en la que sucede la fiesta y es que ha sido un gusto leer la novela exceptuando los últimos capítulos donde se acelera y precipita la novela, dando un final algo insípido en una novela que podría haber sido mucho más redonda, por lo que delimitando ese ínfima parte, es una novela magnífica y con mucho gusto, sin duda una autora que espero seguir leyendo y es que en noviembre saca su próxima novela Los dos amores de mi vida.
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