Marrackech. En Much Loved, Noha, Randa, Soukaina y Hilma son prostitutas, objetos de deseo. La carne se muestra, los cuerpos se exhiben y el dinero fluye al ritmo de placeres y humillaciones. Son mujeres que tienen que superar la violencia de una sociedad, la marroquí, que las utiliza al tiempo que las condena.
Much loved es una de las mejores películas del director marroquí Nabil Ayouch. La película refleja la hipocresía de la sociedad marroquí hacia la realidad de la prostitución en toda su magnitud. Su estreno incomodó a los conservadores y a los dirigentes islamistas, a tal punto que es una película prohibida en Marruecos.
Turismo sexual
En algún momento el espectador sentirá que más que una película es un reportaje a las entrañas de la sociedad marroquí, la que no sale en los catálogos de viaje y la que tampoco nos quieren hablar de ella las múltiples organizaciones socioculturales musulmanas en sus fiestas de te y pastas.
Marruecos uno de los destinos del turismo sexual de Europa y de los países árabes, la película refleja la diversidad de estos calientes hace especial énfasis en la crueldad que los poderosos jeques del petrodólares.
Cine maldito
La prohibición de Much loved y el silencio cómplice de algunos pone en evidencia que la política islámica y sus fanáticos actúan con contundencia, tal es así que actualmente tanto el director como la fantástica protagonista Loubna Abidar que muestra la vida de una prostituta que vende su cuerpo sin perder la dignidad humana, han tenido que exiliarse en Francia después de recibir amenazas de muerte.
Ironías de la vida igual que en la película los los protagonistas sueñas con España como la esperanza para tener una vida digna en libertad