Pleamar – Antonio Mercero – Alfaguara – 18.90€ – 389 páginas
Antonio Mercero ha iniciado una nueva saga de novela negra con Pleamar como primer volumen, en ella los inspectores Darío Mur y Nieves González intentan averiguar que ha ocurrido con las hermanas Müller, dos jóvenes youtubers que no han acudido a su cita habitual como cada jueves y cuyos padres presentan una denuncia ante tal hecho, algo insólito cuando la única pista que tienen es que llevan varias horas sin conectarse a sus redes sociales, pero la búsqueda de estas chicas se verá sacudida con el vídeo de la muerte de una de ellas. Un thriller innovador, exultante, brillante donde cada página es un nuevo suceso y no tienes escapatoria, un libro que pide una segunda parte a gritos porque te deja con el alma en vilo, sin más, una gran historia
Sinopsis general
La inspectora Nieves González estaba en casa con su sobrina Sol, y como cada jueves la niña puso Youtube esperando ver un nuevo vídeo de Pleamar, el canal de las hermanas Müller donde exponen sus experiencias sobre maquillaje, moda y comparten momentos anecdóticos y de risas con sus suscriptores, los cuales ascienden a más de tres millones, una auténtica brutalidad. Pero era extraño, era la hora y aun no habían subido nada, llevaban horas sin conectarse a las redes sociales pero lo más brutal es cuando aparecieron en pantalla maniatadas, amordazadas en un lugar lúgubre donde solo se podían oír los gritos de ambas chicas.
La desesperación de María Lizana por no saber nada de sus hijas durante horas y que estas no subieran contenidos a sus redes sociales alertó de que algo les había sucedido, rápidamente ella acudió junto a su marido Tobías Müller, a poner la denuncia. La noticia no impactó tanto como ellos pensaban en un principio, y es que no habían transcurrido ni 24 horas desde la última vez que supieron algo de ellas, pero ese extraño vídeo alertó también a los inspectores, no se trataba de un reclamo publicitario, sí que había alguien que tenía retenidas a las niñas.
Del caso se encargó Nieves González, quien si tenía conocimiento de quiénes eran esas jóvenes influyentes pero para Darío Mur, el otro inspector del caso no estaban en su conocimiento y eso a pesar de que tenía una adolescente viviendo en casa desde que se divorció, dejando su exmujer a la problemática Ángela con él. Lo primero en estos casos era conocer el entorno de Leandra y Martina Müller, saber cómo eran ellas y por qué generaban tanto impacto y más aun, tratar de entender cuál sería el posible móvil.
Los cimientos de la investigación
Martina y Leandra eran unas chicas normales, no excesivamente guapas pero con estilo propio. A internet subían las rencillas que tenían entre ellas por coger la ropa sin permiso, o gastándose bromas. Entre toma y toma, publicitaban artículos de todo tipo y acudían a eventos de alto nivel social, todo ello de cara a la galería, y es que con esos pequeños videos semanales, las hermanas se fueron embolsando altas cantidades de dinero. Tras escuchar esto, Darío no daba crédito de cómo estas chicas, una aun menor de edad, pudieran tener ya una gran fortuna.
¿Quiénes eran Martina y Leandra? Martina era la hija mayor, mucho más guapa y con mayor gusto por la fama, por el contrario Leandra, era aun menor de edad, más prudente y con menos afición por el mundo mediático. Esta llevaba apenas poco tiempo de relación con Juan, el hijo de Cati, una de las mejores amigas de su madre. Martina, por el momento no tenía una relación estable aunque tuvo un affaire con Vladimir, el que fuera su cámara. Ahora este trabajaba con la competidora directa de las hermanas Müller, por lo que estaba en el ojo del huracán.
Para la madre estar en el foco mediático, no era algo nuevo y es que ella trabaja como tertuliana para varias cadenas de televisión y su presencia en ellas nunca pasó desapercibida por el público. Su actitud, sus intervenciones y sus comentarios siempre han generado repercusión, haciendo que sus hijas pasasen en ocasiones momentos incómodos, por el contrario Tobías Müller, era también conocido pero por su trayectoria como cirujano, ambas profesiones habían hecho que la familia cosechase una gran estabilidad económica, haciendo que las hijas fueran unas niñas algo mimadas y que ahora muestran quiénes son por las redes.
La muerte como producto
El impacto de las hermanas maniatadas no era algo de campaña para promocionar un nuevo producto y eso lo supieron cuando millones de personas fueron testigos como una de las hermanas fallece de una manera cruel y perversa, y lo peor anunciado con premeditación. Ahora había que encontrar el culpable del delito, no sin antes salvar a la otra hermana quién podría acabar de la misma forma.
Darío Mur odiaba las redes pero desde ese momento aun más y es que debían impedir que llegase otro jueves donde se anunciara otro asesinato en pleno directo, ahora todos eran sospechosos pero este no estaría inmerso solo en este caso, sino que la batalla personal que tenía en su casa también le dará más de un quebradero de cabeza.
Mi valoración personal
Pleamar creo casi sin duda que es uno de los mejores thrillers que he leído este año. Tiene todo para convertirse en un éxito, se nota la calidad creativa y narrativa de su autor y es que te mantiene en vilo en todo momento, sus personajes son brillantes y todos tienen un punto de protagonismo, no siendo solo la parte de la investigación la que rige la historia. Tiene un punto de crítica social hacia varios aspectos sociales y políticos de la situación actual, haciéndonos partícipes de sus reflexiones.
A través de un tema tan polémico como es el uso de las redes sociales, su autor nos muestra una sociedad compleja en donde son importantes y donde el objetivo final, así como el de la cámara que usan para exponerse determinan muchas de las actuaciones de las personas. Es una novela brillante, en la que la vida de los investigadores cobra un fuerte sentido, haciendo así que queramos coger la siguiente entrega con más ganas.
Es una novela ágil, dinámica y explosiva en la que el resultado final es apenas lo menos importante porque cada diez o quince páginas tienes una nueva teoría, personaje o estás inmerso en otra parte de la historia. Creo que Pleamar ha sido una primera entrega casi insólita que me ha deleitado y me ha hecho disfrutar, solo me da pena que haya sido tan corta porque necesito un poco más.
Es una novela para todos los lectores, pero especialmente para aquellos que hayan disfrutado con títulos como los de Carmen Mola como son La novia gitana, La Red púrpura o La Nena y puede que algo le haya calado de estas novelas porque participa como guionista de su adaptación televisiva.
Ya os digo que no lo dejéis escapar, además tendré el placer de entrevistarle por lo que en breve podremos saber cuándo podremos disfrutar del nuevo caso.
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