La cinta supone una nueva vuelta de tuerca de Mungiu a la sociedad rumana
Caramel Films y BTEAM Pictures distribuyen al alimón R.M.N. Algo que se está volviendo bastante común. Esta cinta de Cristian Mungiu se ambienta durante la Navidad, como Entre valles, y cuestiona de nuevo la bondad y las motivaciones de las personas comunes. Su presentación en España se produjo durante el 70 SSIFF en la sección Perlak. Pero, a pesar de su carácter minoritario, ha aguantado muy bien tras su estreno a final de diciembre.
Sinopsis de R.M.N.
Unos días antes de Navidad, Matthias vuelve a su pueblo natal, una localidad multiétnica de Transilvania, tras dejar su trabajo en Alemania. Está preocupado por su hijo, Rudi, que ha crecido sin él, y por su padre, Otto, que se había quedado solo, y desea volver a ver a Csilla, su exnovia. Trata de implicarse más en la educación del niño, que ha pasado demasiado tiempo a cargo de su madre, Ana, y quiere ayudarle a superar sus miedos irracionales.
Cuando la fábrica que Csilla dirige decide contratar a empleados extranjeros, la paz de esta pequeña comunidad se verá perturbada, y las inquietudes afectarán también a los adultos. Las frustraciones, los conflictos y las pasiones volverán a aflorar, rompiendo la paz aparente de la comunidad.
Comentario
La desolación de su protagonista Matthias (Marin Grigore) es palpable, desubicado con su esposa e hijo, desubicado con la mujer que ama, desubicado en Alemania y desubicado en la sociedad que encuentra. La decisión y dureza de las mujeres es el otro elemento reseñable en R.M.N. Tanto la novia de Matthias (Csilla, Judith State), como la madre de su hijo (Ana, Macrina Barladeanu) y la dueña de la fábrica de pan (la Sra. Dénes, Orsolya Moldován) son ejemplos de esto. Y finalmente está la debilidad, el prejuicio y la cobardía de la autoridad, representadas en el alcalde, el sacerdote, el médico o el policía.
Ya comentamos con Suro el racismo que se da entre las clases bajas y los que consideran aún más abajo. Aquí el director rumano lo combina con la discriminación que los rumanos sufren en el extranjero y su necesidad de emigrar para progresar. Como ya hiciera en Entre valles, utiliza además la época navideña para cuestionar el verdadero espíritu de amor y solidaridad de esa época y de los que dicen vivir esas fiestas.
Hay una escena brutal en la que, en una iglesia, se produce una asamblea (aunque luego pasa a un salón municipal) para decidir si se debe expulsar del pueblo a los tres inmigrantes esrilanqueses que trabajan en la fábrica de pan.
La fotografía llena de oscuridad y tonos azulados contribuye a una atmósfera de frío y aspereza, de falta de afecto y de empatía. Esta frialdad sólo se rompe en las escenas del interior del hogar de Csilla y en la casa de la familia que inicialmente aloja a los esrilanqueses.
En resumen
El cine de Mungiu parece cuestionar la bondad y los valores de la sociedad rumana. Una sociedad multi étnica que se sienta margina en el exterior pero que a su vez margina a ciertos grupos como los gitanos y se comporta con brutal racismo contra los extranjeros que provengan de países exóticos.
R.M.N. es dura pero interesante al mismo tiempo.
Tráiler
Ficha técnica de R.M.N.
- Director: Cristian Mungiu
- Guion: Cristian Mungiu
- Reparto: Marin Grigore, Judith State, Macrina Barladeanu, Orsolya Moldován, Rácz Endre, József Bíró, Ovidiu Crisan, Zoltán Deák, Cerasela Iosifescu, Andrei Finti, Bacs Miklos, Alin Panc, Victor Benderra
- País: Rumanía
- Duración: 125 minutos
- Fotografía: Tudor Vladimir Panduru
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