Después de conducir este coche, la conclusión es clara: está pensado para la vida real. Es espacioso, ágil y eficiente, ofreciendo diseño, comodidad, tecnología y un consumo ajustado. Todo esto sin renunciar al placer de conducir.
El Renault Symbioz E-Tech Full Hybrid promete ser un coche familiar polivalente, combinando eficiencia, espacio y tecnología. Y es un coche que cumple lo que promete, destacando por su suavidad en marcha y su optimización del consumo.
En cuanto a tamaño, el Symbioz se sitúa entre los modelos de la misma marca Captur y Austral, con 4,41 metros de largo y 1,79 metros de ancho. Su tamaño compacto lo hace ideal para la ciudad, donde se mueve con soltura. Además, su interior espacioso y su modularidad lo convierten también en una buena opción para viajes largos.
Otro punto a tener en cuenta es su maletero. Con hasta 624 litros de capacidad (1.582 con los asientos abatidos), ofrece una versatilidad destacable dentro de su segmento. Además, la banqueta trasera deslizante permite jugar con el espacio según las necesidades de cada momento.
Al volante, el Symbioz transmite una sensación de fluidez y confort. Su motorización híbrida de 145 CV y su transmisión automática, nos ofrecen una conducción suave y eficiente, con un consumo bastante ajustado. La tecnología híbrida predictiva ajusta la gestión de energía para maximizar el uso del motor eléctrico, lo que se traduce en una gran autonomía y sin necesidad de enchufes. Durante nuestra prueba, de más de 400Km por carretera, autopista y ciudad, hemos mantenido un consumo real de 5,5 litros a los 100km.
La suspensión, tacto de los frenos y calibración de la dirección, contribuyen a una experiencia de conducción equilibrada. En ciudad, al coche se le nota ágil, y en carretera mantiene una estabilidad y suavidad destacables. En cualquier terreno se percibe más ligero de lo que es. Además, el sistema Extended Grip mejora la tracción en superficies complicadas con modos específicos para nieve y todoterreno.
Por dentro, el diseño combina funcionalidad y sofisticación. Los acabados en aluminio cepillado y la tapicería aportan un aire moderno, mientras que el sistema multimedia openR link con Google integrado pone toda la tecnología al alcance del conductor. Su pantalla táctil vertical de 10,4 pulgadas y el cuadro de instrumentos digital de 10,3 pulgadas ofrecen una interfaz intuitiva y personalizable. Además, cuenta con una serie de botones que nos facilitan la vida a bordo, accediendo con rapidez y seguridad a distintas funciones.
En términos de seguridad, Renault ha dotado al Symbioz con hasta 29 asistentes a la conducción, incluyendo el Active Driver Assist, que permite conducción autónoma de nivel 2, y la frenada de emergencia en marcha atrás. Además, el botón My Safety Switch permite activar o desactivar fácilmente los principales sistemas de asistencia.
Fabricado en la planta Renault de Valladolid, el Symbioz está disponible en varios acabados (Techno, Esprit Alpine e Iconic) y lo tenemos disponible en la amplia red de concesionarios Renault a partir de unos 29.600 Euros.
Después de probarlo, puedo decir que el Renault Symbioz es un coche que encaja a la perfección en nuestro día a día. Su equilibrio entre espacio, eficiencia y tecnología lo convierte en una opción a tener en cuenta si buscas un híbrido sin complicaciones, con buen comportamiento, atractivo, etiqueta ECO y un consumo realmente ajustado.
