‘Sicilia 1943’, la invasión que abrió la primera brecha en el III Reich

Sicilia 1943. El primer asalto a la fortaleza Europa. James Holland. Traducción de Joan Soler. Ático de los libros.

Los aficionados a la historia y sobre todo a la literatura militar están de celebración. El libro de Holland es uno de esos tomos sobre un episodio decisivo en la II Guerra Mundial. Y está escrito con esa voluntad totalizadora de narrar las estrategias, los grandes movimientos, pero también las pequeñas anécdotas, las que humanizan a los soldados, las que dan cuenta del horror de una batalla que se libra cuerpo a cuerpo. Sicilia 1943 es un libro colosal. Busca un relato pormenorizado de la que fue la gran ofensiva anfibia para empezar a desmoronar el III Reich. Sicilia es el asalto a la fortaleza, antes del desembarco de Normandía, algo menos de un año después. Es también la gran batalla en la que colaboran tropas americanas y británicas. Es también el primer episodio de guerra para los soldados canadienses. Y es el talón de Aquiles del imperio del eje. Caída Sicilia, cae Mussolini, y caído el Duce, Hitler se queda solo. Y eso fue posible por el éxito de la llamada operación Husky.

Sicilia 1943

Sicilia 1943 narra las operaciones de preparación y el desembarco que movilizó a 160.000 soldados británcios, americanos y canadienses, más de los que se movilizaron para el desembarco de Normandía. La invasión de Sicilia puso a punto la guerra aérea, que fue fundamental en la victoria final de los aliados. El asalto a Italia no habría sido posible sin la victoria aliada en la campaña de África. Controlado Túnez, salvada Malta de los bombardeos alemanes e italianos, el salto a la isla era posible.

Los aliados contaron con la ventaja de la soberbia hitleriana. El Führer estaba convencido de que el asalto a Europa se haría a través de los Balcanes y nunca por Italia. Se equivocó. pero su error fundamental fue no escuchar a los jefes militares que dirigían las tropas en suelo italiano, y que estaban convencidos de una invasión por la costa sur siciliana.

El desembarco se produjo el diez de julio de 1943, de madrugada, en las playas junto al cabo Passero, en el extremo meridional de Sicilia. Las tropas llegaron con pocos planes trazados de antemano. El general Alexander no era partidario de dar instrucciones cerradas para una tropa que se iba a encontrar con una isla de costas escarpadas, colinas rocosas, pocas carreteras, muchos caminos de cabras, y pueblos hundidos en la miseria. Una parte de las tropas llegó a bordo de planeadores, pero esa parte del desembarco fue un caótico desastre.

En Sicilia 1943 se dan cita los grandes generales y mandos del final de la II Guerra Mundial: un histriónico Patton, un sobrio Eisenhower, los británicos Chatterton y Coningham, Alex Campbell por los canadienses. Y en lado del eje los Baade (División Panzer) y Cibulka. En el mando italiano, la obra de Holland sigue los pasos durante todo el libro del teniente Livio Messina, de la División Livorno.

Hay varias conclusiones relevantes en la obra de Holland. La primera es que Eisenhower sobrestimó la fortaleza de las tropas del eje en la Italia del sur. La resistencia fue mucho menor de la esperada. Los italianos se desmoronaron muy pronto y los alemanes, aunque lo intentaron con tesón, fueron incapaces de detener el avance de las tropas aliadas. La segunda es que la invasión de Italia, menos heroica en términos de dolor y sufrimiento que la de Normandía, fue más decisiva para el final de la guerra que el llamado Día D.

Sicilia 1943

El asalto demostró que la coordinación de las tropas alemanas e italianas era muy mala, y el éxito de la Husky fue determinante para que Mussolini perdiera el poder. En quince días, Sicilia cayó en manos de los aliados. El Duce se entrevistó en Venecia con Hitler el 22 de julio. Le pidió que buscara una paz con los soviéticos, pero no le advirtió de su propia debilidad política. Ya en Roma se organizaba la conspiración contra él. A la vuelta a la capital, el Rey le destituyó y puso al frente del gobierno a Badoglio.

En Sicilia 1943, James Holland despliega una capacidad narrativa descomunal. Es capaz de controlar los grandes movimientos en el escenario bélico, pero también las pequeñas anécdotas de los soldados y los pilotos de combate. Traza carreras militares, bucea en las relaciones de unos militares con otros, explora en sus diarios y nos descubre personajes tan fascinantes como el comandante Hans Valentin Hube, que había perdido un brazo en la batalla de Verdún y que a pesar de esa herida seguía siendo uno de los militares más relevantes de la Alemania nazi y uno de los hombres de confianza de Hitler.

El único misterio que se le resiste a Holland, como a todo historiador, es el del papel de Cosa Nostra en el desembarco. Sí, afirma la implicación de Lucky Luciano y sus redes en el apoyo al desembarco, relata con detalle los mensajes que le llegaron al mafioso Calòggero Vizzini en su pueblo, Villalba, pero a la hora de establecer la contribución mafiosa se pierde en la nebulosa. La mafia tuvo un papel relevante. Sobre todo en desmontar cualquier resistencia italiana a la invasión, y en el recibimiento entusiasta que los sicilianos les dieron a las tropas de Patton y de Montgomery. Al fin y al cabo, don Calòggero odiaba a Mussolini más que los aliados. En el libro de Holland, a pesar de la guerra, Sicilia sigue siendo ese lugar maravilloso en el que la guerra huele a cadáveres quemados, a humo y a limoneros.

Fanfan y Ludiana te mantienen al día de las novedades en entretenimiento, y te ofrecen servicios de comunicación y herramientas estratégicas para gestionarla. Si quieres estar al día de la actualidad de FanFan y enterarte antes que nadie de todo lo que publicamos, síguenos en nuestras redes sociales: Facebook, Twitter, Instagram, Ivoox, Spotify YouTube

Alfredo Urdaci
Alfredo Urdaci
Nacido en Pamplona en 1959. Estudié Ciencias de la Información en la Universidad de Navarra. Premio fin de Carrera 1983. Estudié Filosofía en la Complutense. He trabajado en Diario 16, Radio Nacional de España y TVE. He publicado algunos libros y me gusta escribir sobre los libros que he leído, la música que he escuchado, las cosas que veo, y los restaurantes que he descubierto. Sin más pretensión que compartir la vida buena.

Table of contents

Read more

Otras historias en FANFAN