Sofía Rincón: ‘Ser reaccionario es fundamental para ser feliz’

El feminismo está obsoleto

Sofía Rincón viene de hacerse las uñas. Viste botas de paso duro, falda de cuero y una chaqueta adornada de pinchos en las hombreras, como si su espalda fuera la tapia de una casa de ricos, erizada de cristales de botellas rotas. La camiseta tiene pintada una calavera sicodélica. Me pide que en la foto se vea el cráneo multicolor. Advierto que, si tiene que salir el cráneo la cara de la artista quedará oculta, y uno prefiere carne antes que hueso. Así que nos ponemos a imitar, yo a Avedon, ella a Meryl Streep. Las manos sostienen la cara de Sofía Rincón como si fuese una máscara. Eso es la persona, desde los griegos: máscara de quita y pon.

-¿Quién es Sofía Rincón?

Una artista, sencillamente. Me suelen pedir definiciones muy largas. Soy artista visual. No es que sea multidisciplinar, sino que me dedico a lo visual, que es algo que se puede desarrollar en muchos campos

-Es decir, que maneja lenguajes y técnicas diversas.

Me inspiro mucho en la música, y hay ideas que tienen un formato perfecto en un cuadro, y otras en un vídeo, o en una fotografía. Cada idea tiene su formato adecuado. Tu público es el que entiende lo que haces de alguna manera. Alguien que me siga solo por los vídeos, si no aprecia todo lo demás, no vale. Yo soy un conjunto. Soy artista y llevo las cosas a todo lo que puedo. Me interesa que las personas vean el conjunto

-Su estilo es llamativo, versátil, provocador, y lleno de los iconos de la política.

Yo no uso la provocación. Ese es un extra. Busco expresar cosas que se me ocurren. Los políticos son gentes a los que les gusta que les tomen muy en serio. Ese es su target. Yo utilizo la política como un recurso. Igual que un escritor utiliza las metáforas para hacer literatura. Yo uso la política porque me parece divertido. Si lo satirizas estás dando la vuelta al panorama. El tema no es si yo estoy a favor o en contra de algo. Eso es irrelevante. Por ejemplo, el cuadro del Che haciéndome una felación. No es algo pensado para buscar un efecto, o una lectura racional. Quería hacer algo sobre el Ché, tiene una imagen potente, y le detesto. Así que busqué imágenes en Google de Guevara y encontré alguien que había hecho un Ché con la lengua de los Rollings. Mi subconsciente me hizo ver ahí una polla. Y eso lo llevé a un cuadro. Que me la chupe a mí. Eso es algo que surgió por azar, en mi subconsciente.

El feminismo está obsoleto

Sofía Rincón

-La respuesta es el escándalo.

Suele pasar. Pero luego, mira, El Mundo hicieron un artículo sobre mi y entendieron perfectamente esto. Ser transgresor es como ser humilde. No puedes ir por la vida diciendo que eres humilde porque es ridículo. Si lo dices ya no lo eres. La transgresión tiene que dar un extra. La transgresión por la transgresión no tiene sentido. Mi objetivo no es expresar un mensaje sino hacer lo que me de la gana. Que sea trasgresor o no es secundario

-Pero chocas con las religiones contemporáneas, ahora lo transgresor…

Ahora lo transgresor es meterte monja.

-Y meterte con el feminismo radical, y utilizar los iconos de la izquierda.

Yo creo que ser reaccionario en general, en cualquier ámbito es fundamental para ser feliz. Si estas rodeado de progres, vas a ser lo más facha que puedas, a ver qué pasa, y se estás rodeado de fachas va a ser lo más progre. Todo en la vida son luces y sombras, pero ahora estamos en una época en la que todo el mundo afirma tajante las cosas. Debo ser muy ignorante. Igual dentro de diez años pienso de otra forma , o me meto a monja o soy sadomasoquista. Yo digo cosas que son muy de sentido común, y sin embargo llegan personas que me dicen, ¡cómo metes en esto, con esta persona! Yo lo que busco es pasármelo bien y no dar lecciones. Por eso están siendo un fracaso estas películas adoctrinadoras, que intentan meter un mensaje. El feminismo está obsoleto. Yo no pienso en hombres y mujeres, pienso en prótesis biónicas y pienso en neón.

-Hay un mundo inquisitorial en el que no puedes decir, no puedes pensar, no puedes pintar, y usted pinta lo que no se puede pintar. ¡Con lo bien que viviría en la izquierda!

Tendría todas las subvenciones del mundo, pero es que soy una bocazas. No es una cuestión de heroicidades, es una cuestión de falta de prudencia, en eso soy un fracaso.

-¿Se vive de la pintura?

Se tarda en lograrlo, pero sí. Nadie que viva por su cuenta vive de una sola cosa. Mi primer gran logro en la vida fue la venta de mi primer cuadro a un buen precio. Diez mil dólares. Lo vendí en Miami.

-¿Hay lugares donde se entiende mejor tu obra?

La gente de Miami entiende perfectamente lo que estoy diciendo. Cuando digo que el futuro del toreo son toros robot y que el torero lleve un capote de leds y un traje fluorescente poca gente entiende la performance. Mi mejor público son mexicanos, venezolanos y un sector del público español.

-¿Y en España?

Hay tendencia a tomárnoslo todo a la tremenda. La vida es un escándalo en sí misma. Si no bebes te mueres. Es un escándalo que estés sujeto a un maldito líquido. Pero no, un escándalo aquí es algo que ha dicho Trump, alguien a quien le importas una mierda.

-¿Sabe usted que en griego escándalo significa trampa?

¿De verdad? Qué maravilla. Es pura poesía.

Alfredo Urdaci
Alfredo Urdaci
Nacido en Pamplona en 1959. Estudié Ciencias de la Información en la Universidad de Navarra. Premio fin de Carrera 1983. Estudié Filosofía en la Complutense. He trabajado en Diario 16, Radio Nacional de España y TVE. He publicado algunos libros y me gusta escribir sobre los libros que he leído, la música que he escuchado, las cosas que veo, y los restaurantes que he descubierto. Sin más pretensión que compartir la vida buena.

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