Virginia Troconis y Pablo Ojeda nos hablan en esta entrevista sobre Comida Vamos a llevarnos bien, un libro que surgió tras la pandemia y en el que abordan a través de pequeños consejos, recetas y trucos como relacionarnos de manera saludable con la alimentación. Un libro imprescindible para forjar la unión entre la comida y la salud
Buenas, en primer lugar deciros que es un auténtico placer poder realizaros esta entrevista y es que ya solo el título de vuestro libro llama la atención Comida, vamos a llevarnos bien ¿Por qué creen que se tiene ese mal concepto en ocasiones de enfrentamiento con la comida?
Virginia:
Es un libro sobre nutrición, sin ningún truco mágico, sin ninguna dieta a seguir, yo creo que eso es lo que lo hace diferente, es un libro fácil de leer, de entender, con el que pretendemos influir de manera positiva y que se entienda que se puede tener una buena relación con la comida, que se le dé la importancia que tiene, no podemos vivir en una constante lucha con el peso, con las calorías.
Pablo:
Porque hoy día está todo polarizado, hasta la comida, todo es o bueno o malo, o prohibido o permitido, o sano e insano, por lo que cuando nos enfrentamos a esos productos ( todos lo hacemos) que no son tan interesantes, al final lo que va a suceder es que nos sintamos culpables, y cuando entra la culpa, entran las malas decisiones.
Este libro no solo nos expone una serie de recetas sino también nos da una amplia explicación de cómo tratar el tema de la alimentación y la salud, una relación cada vez más arraigada ¿Qué tiene de diferente vuestro libro con respecto a los demás libros sobre divulgación gastronómica?
Virginia:
Este libro nace después de la pandemia, en la que estoy segura que se le movió el suelo a muchos, yo siempre recuerdo que en casa hicimos una planificación, un menú para diferenciar la semana del fin de semana, porque teníamos que entender que no estábamos de vacaciones, y ya los fines de semana lo dejábamos más para hacer recetas más especiales, y comencé a hacer directos los domingos con recetas.
A través de una amiga en común conocí a Pablo y me propuso hacer un directo sobre el impacto que había tenido la pandemia en la alimentación, en el peso, y en el aspecto psicológico.
Lo disfrutamos muchísimo y tuvo mucha repercusión, hicimos alguno más y Pablo me planteo escribir un libro en el que yo dejo claro que yo no voy de nada, no soy Nutricionista, ni escritora pero me encanta poder influir de forma positiva, y compartir mis vivencias, mi experiencia de vida con los lectores, para que la gente se sienta identificada y se dé cuenta que todos nos podemos equivocar, pero que lo no podemos es tirar la toalla, en la búsqueda de encontrarnos mejor con nosotros mismos.
Pablo:
Este libro queremos que sea un manual de consulta, de hecho, creo que puede ser un libro sin una sola dieta tratando a fondo estos temas, y sobre todo un libro donde a través de experiencias muy muy personales, el lector se puede sentir identificado, seguro sienten que eso les pasa a ellos, y podemos ayudar a mejorar algunos aspectos.
Nos gustaría saber cómo fue esa proposición de realizar el libro ‘Comida vamos a llevarnos bien’, si ya se conocían y cómo ha sido su vinculación durante el proyecto, porque escribir a cuatro manos debe ser complicado.
Virginia:
No ha sido para nada difícil escribir a cuatro manos, cada uno tiene su parcela y nos hemos compenetrado mucho juntos, he aprendido y sigo aprendiendo mucho de Pablo.
Pero fue una experiencia súper enriquecedora, por muchos aspectos, porque quizá se conoció más de mí, de mi forma de ser, me entregué por completo, lloré, reí, sufrí y también aprendí… siempre he estado vinculada con la alimentación saludable y poco a poco voy aprendiendo más.
Pablo:
Nos presentó una amiga en común en plena pandemia, y decidimos hacer una serie de directos hablando de vida sana. El impacto fue muy alto y ese fue el inicio del proyecto.
Luego, aunque parezca mentira ha sido súper fluido, Virginia es muy muy ordenada y meticulosa en el trabajo y eso facilita mucho la tarea cuando se trata de escribir.
Pablo Ojeda es dietista de profesión y ha hecho numerosas investigaciones en los distintos aspectos de la comida y la salud ¿Crees sinceramente Pablo que ahora conocemos más los efectos de las “dietas milagros”? ¿Qué es lo que aún no se reconoce de los perjuicios de este tipo de dietas? ¿Cómo podemos ayudar a subsanarlos?
Pablo:
Conocemos perfectamente los efectos, pero la sociedad necesita soluciones a sus problemas para ayer, y ahí vienen los problemas, que hay mucha gente que juega con la vulnerabilidad y mientras una verdad se está atando los cordones, la mentira le da siete veces la vuelta al mundo.
Si una dieta funcionara, no estaríamos en el 65% de sobrepeso y obesidad, es tan sencillo como eso.
Cada vez se habla más de los conceptos de “realfooding”, “comida real” y esto ha hecho cambiar el mundo de la alimentación pero ¿Cómo puede saber alguien qué algo es saludable? ¿Qué se debe hacer para dejar atrás las dietas y empezar a comer bien y no sentirse triste? ¿Tiene relación la comida con la felicidad?
Virginia:
Yo pienso que lo más saludable son los alimentos que no llevan etiquetas, considero que el movimiento “realfooding” comida real, como concepto son estupendos, pero no comparto esa obsesión o fanatismo por este tipo de corrientes.
Lo primero que se debe hacer, es darte cuenta y tomar la decisión de que quieres hacer un cambio en tu vida, no significa sólo cambiar alimentos, significa hacer cambios paulatinos en nuestros hábitos y conductas, cambias que podamos mantener en el tiempo.
La comida tiene relación con la felicidad, pero no debería ser tan protagonista, debemos entender que la comida es más que comida, que es disfrutar con amigos, con la familia.
Pablo:
Saber si algo es sano, es sumamente sencillo, es decir, las cosas sanas no necesitan ninguna promoción especial ni mensaje salubre, una manzana, un pescado, frutos secos, cualquier verdura, etc, no hay duda de que son sanos, en el momento que te preguntas si algo es sano o no, ya es la primera señal para estar alerta.
Cuando tenemos una mala relación con la comida es como si tenemos alguna lesión en un músculo y debemos ir al fisio, pues debemos ir a un psicólogo especializado, porque la culpa no se cura con una dieta.
La comida tiene una relación sumamente directa con la felicidad, el 90% de la serotonina (hormona de la felicidad) se segrega en la zona intestinal, por lo que una mala alimentación afecta de manera directa a nuestra flora bacteriana y por ello a un mal funcionamiento de la secreción de serotonina.
España es un país con una dieta mediterránea fantástica, además la comida siempre es sinónimo de celebración, uno de los elementos más populares que tenemos es el Aceite de oliva virgen y de este producto también nos hablas en el libro ¿Qué mitos hay sobre él?
Virginia:
Uno de los más graciosos es que si te tomas un vasito de aceite de oliva en ayunas, se crea una película en el estómago que hace que no absorbas ciertos alimentos.
Pablo:
Primero decir que la dieta mediterránea son los padres, es decir, es el ejemplo de nuestros padres los que van a hacer en esos inicios de vida tan importante, como nos vamos a relacionar con la comida.
El Aceite de Oliva Virgen Extra es magia para nuestro organismo, pero debemos cuidar las cantidades diarias ya que es altamente calórico.
Alguna vez he escuchado que, si tomamos un chupito de Aceite, hace crear una película en el estómago y no absorbemos las calorías de lo que comemos, NO tiene ningún tipo de sentido ni evidencia científica.
Supongo que serán numerosos lo casos que llegan a tu consulta en relación a la pérdida de peso, pero ¿es necesario seguir manteniendo el concepto de “dieta” o es mejor el de “hábito”? Contadnos cómo este libro puede ayudar a cambiar la visión de la relación con la comida.
Virginia:
Me gusta más el concepto de hábito, o también aprender que la palabra dieta significa “RÉGIMEN DE VIDA” y que por ende no a todos nos puede funcionar la misma, lo que tenemos es que adaptar nuestra alimentación a nuestra vida.
Pablo:
Por lo pronto a entender que la palabra dieta viene del griego Daitia, que significa régimen de vida, es decir, de adaptar lo que comes a tu día a día.
En el libro damos recursos para esos momentos de hambre emocional y sobre todo, información para que el lector entienda que sucede en muchas ocasiones y pueda tomar mejores decisiones.
También nos encantaría saber cómo ha sido el proceso de escritura de este libro, qué ideas tenían previamente y si creen que aun queda mucho por descubrir para allanar el terreno sobre la gastronomía.
Virginia:
Ha sido un camino maravilloso, yo por mi parte he disfrutado y he aprendido mucho de mi compañero, durante el proceso, pero no quiero dejar de agradecer a la editorial Planeta, por su apoyo, ha sido estupendo el equipo que hemos formado.
Queda mucho por descubrir en este terreno y muchos temas que podríamos abordar…
Pablo:
La experiencia ha sido muy bonita, hemos plasmado nuestras ideas en papel, hemos sacado los capítulos, los hemos desarrollado, hablado, debatido y plasmado.
Queda mucho y sobre todo, queda repetirlo un millón de veces ya que no es fácil quitar muchos estereotipos muy muy muy calados en la sociedad.
Es un libro cercano y ameno, en el que se abordan temas como el “famoso” ayuno intermitente, ¿Qué nos podríais hablar de él? ¿Es realmente beneficioso? ¿Lo puede hacer todo el mundo?
Virginia:
Gracias por lo de cercano y ameno, porque esa era nuestra idea.
Justamente sobre el Ayuno Intermitente, te puedo hablar en primera persona, porque lo he practicado durante mucho tiempo, es más, algunos días sueltos también lo hago, a mi me va muy bien, tiene muchos beneficios, de los que prefiero te hable Pablo para que te los explique desde un punto de vista más técnico, lo que si tengo claro es que no es recomendable para todos.
Y que es muy importante lo que comemos durante las horas de ingesta de alimentos.
Pablo:
El ayuno es un estilo de vida, con esto quiero decir, que no se debe usar como una dieta al uso.
Tiene múltiples beneficios, como mejorar la glucosa en sangre, mejora perfil de las grasas, favorece la autofagia celular, mejora el hambre y la saciedad y un lárgo etc.
Dicho esto y en mayúsculas NO es para todos, ya que los TCA son la segunda causa de enfermedad crónica en los chavales y quitarles comida va absolutamente en contra de lo que se debe hacer para mejorar la relación con la comida.
Y ya para ir finalizando, de todos los asuntos que se tratan en Comida, vamos a llevarnos bien, ¿Cuál es el aspecto más reivindicativo del libro? ¿Hay algún tema que haya generado algún conflicto entre vosotros?
Virginia:
Yo reivindico que para estar bien no hay que hacer nada extraordinario, que el comer bien no tiene es lo extraordinario, debería ser lo normal.
Otra reflexión importante es que en la subida y/o la bajada de peso, según un estudio influyen 200 factores y la comida sólo es uno de ellos.
Y ya para terminar, me gustaría plantear una pregunta. ¿ Por qué haces una dieta (con el concepto que la mayoría tiene sobre el significado de dieta)?
Por bajar de peso o por sentirte mejor…
Ahí lo dejo😉
Pablo:
Pues ciertamente no ha habido ningún tema conflictivo.
Lo más reivindicativo es la normalización de la vida, que todos podemos sufrir problemas en un momento determinado y pedir ayuda para salir de ellos es de valientes.
Si nos tuvierais que recomendar algún libro relacionado con la alimentación o la vida saludable ¿Cuál sería vuestro imprescindible?
Virginia:
Comida vamos a llevarnos bien
Pablo:
Comida vamos a llevarnos bien
Otros libros que te ayudarán a conocer más sobre la salud y el deporte son:
Mucho más que Fitness de Cesc Escolá, El método Sakuma: Full Body, Cocina Comida Real de Carlos Ríos
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