La última película de Guy Ritchie, la primera de José javier en un autocine. Esperando que tanto la una como la otra sean un punto y seguido y no un punto final. Aprovecho y comento The Gentlemen: Los señores de la mafia
El mono de cine ha podido y me he plantado en el autocine que Golem ha montado en el Navarra Arena. Es ocasión de ver en cine The Gentlemen: Los señores de la mafia. La última cinta de Guy Ritchie se estrenó a finales de febrero y apenas tuvo dos semanas en pantalla.
El autocine
Todo muy ordenado, gente amable que te da instrucciones a la entrada. Esto resulta muy útil, dada la falta de cultura de autocine a la que se suman las normas de distanciamiento. Si quieres tomar algo te sirven en el propio automóvil.
Aunque puedes sintonizar la película en tu radio, si bajas la ventanilla se escucha perfectamente por el sistema de sonido del local. En cuanto a la imagen, se entiende perfectamente por qué en los autocines hay descapotables o convertibles, con muchos menos obstáculos entre espectador y pantalla. Mi viejo Seat Toledo es bajo y no parece lo más apropiado. Supongo que para quien tenga un monovolumen o un SUV, más altos y con parabrisas más amplios la experiencia será mejor. Aún así logré apañarme para ver la película sin problemas.
Sí hay que poner dos pegas. Una es para la organización. Las películas acaban al final de los títulos de crédito. Quién quiera puede irse antes, pero no se ha de animar al espectador a abandonar la sala si la proyección no ha acabado. Otra es para el público. Un par de espectadores andaba encendiendo las luces de sus vehículos durante la proyección. No queda clara la necesidad pero sí la molestia al proyectar su luz contra la pantalla. No quiero imaginar qué pensarían los conductores que estuvieran justo delante de dichos vehículos.
Vayamos ahora al meollo y hablemos de la película.
Sinopsis de The Gentlemen: Los señores de la mafia
Mickey Pearson es un expatriado estadounidense que ha triunfado en Londres, gracias al negocio de la marihuana. Ahora quiere vender su imperio valorado en miles de millones. Pero sus clientes no quieren pagar lo que vale. Esto desencadena diferentes tramas paralelas, en las que se implican organizaciones rusas, la mafia china e incluso un director de un periódico que se convierte en extorsionador.
Comentario
Guy Ritchie regresa a sus orígenes con una película que evoca Lock & Stock (1998), también y muy especialmente a Snatch: Cerdos y diamantes (2000) y, en menor medida, Rocknrolla (2008). Quizá The Gentlemen adolece de la frescura de sus primeras cintas, aunque esto es lógico. Ritchie tiene 20 años más y mucho cine a sus espaldas, ahora no toma los mismos riesgos y tiene limitaciones derivadas de una relación más profesional, más comercial con la industria cinematográfica.
El género es inclasificable, fundiendo thriller, acción y comedia. Si algo ama el cine es hablar de cine, y así The Gentlemen comienza con una metáfora cinematográfica. Es la excusa para que buena parte de la historia se cuente en flashbacks. Pero además está llena de referencias, guiños y homenajes.
La trama es complicada, retorcida incluso. Tenemos múltiples historias e hilos narrativos que se entretejen. Alguna de estas hebras se revela de modo inesperado. Pero Ritchie es algo tramposo, para aumentar el efecto sorpresa oculta al espectador información que los personajes ya conocen. La cinta requiere de toda nuestra atención para no desorientarnos, aunque tanto giro puede ser ligeramente excesivo. Es como un jugador brasileño que enlaza regate tras regate hasta que gritas ¡Tira a puerta!
La película contiene violencia. No podría ser de otro modo en una película de traficantes y bandas. Pero esta violencia es muy estilizada, acorde al tono de la cinta. Está presente pero siempre es controlada. Sucede pero siempre fuera de plano. Como en las bandas de verdad, hay un resultado pero rara vez presenciamos el acto.
Los actores
Uno de los elementos sobresalientes de esta cinta es el impresionante elenco. Los personajes están muy estilizados, acorde con la historia. Y se nota que sus actores disfrutan en sus papeles.
Matthew McConaughey está sobresaliente en su papel de mafioso que tras una apariencia elegante y distante oculta a un despiadado rey de la selva. Colin Farrell asombra con su chándal a cuadros, sus muchachos de atuendo similar y sus diálogos. Charlie Hunnam es convincente en su papel de Ray, matón elegante, amante de la buena vida, callado y con manía hacia los yonkis.
Henry Golding está correcto como Dry Eye, joven tiburón mafioso que aspira a mucho más. Y Jeremy Strong es la representación ideal, casi paródica, de un americano mafioso pero pijo.
Pero la sorpresa agradable es Hugh Grant. El actor parece disfrutar en extremo de su papel de investigador privado, homosexual. Un personaje que busca aprovecharse de los diversos implicados en las tramas que rodean Mickey Pearson.
En conclusión
The Gentlemen: Los señores de la mafia responde correctamente a la pregunta fundamental del cine. Al verla nos hacemos la pregunta ¿qué va a pasar ahora?, sin mirar el reloj, sin querer que acabe. Es entretenida y divertida de principio a fin, y merece la pena ver sus interpretaciones, especialmente las de Matthew McConaughey, Charlie Hunnam, Colin Farrell o Hugh Grant.
Tráiler
Ficha Técnica
- Director: Guy Ritchie
- Guión: Guy Ritchie, Ivan Atkinson, Marn Davies
- Reparto: Matthew McConaughey, Charlie Hunnam, Michelle Dockery, Jeremy Strong, Colin Farrell, Henry Golding, Tom Wu, Chidi Ajufo, Hugh Grant, Eddie Marsan
- País: EE.UU.
- Duración: 113 minutos
- Música: Christopher Benstead
- Fotografía: Alan Stewart
Cartel deThe Gentlemen: Los señores de la mafia
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