Alice Kellen publicó recientemente su novela «Nosotros en la luna», de esta y de sus nuevos proyectos nos habla en la entrevista que ha concedido a la web.
Conociendo a Alice Kellen
En primer lugar, quería agradecerte en mi nombre y en el nombre de Fanfan que nos concedas esta entrevista. Hay dos preguntas que me generan mucha curiosidad y se las propongo a todos mis entrevistados, la primera de ellas es ¿cuándo comienzas a escribir, cuándo te das cuenta que es a esto a lo que te quieres dedicar? ¿Tienes alguna formación con respecto a la escritura?
Yo no creo que haya un momento concreto, al menos en mi caso no hubo una revelación, fue algo más paulatino. Desde niña me gustaba escribir, inventar historias, cuentos.
Conforme vas creciendo tiras hacia algo más seguro, pero al final lo que empieza siendo un hobbie se termina haciendo algo más profesional. Y llega un momento en el que te paras a pensar y te das cuenta que ya te estás dedicando a esto, que es a lo que más horas dedicas al día y es ahí donde tomas un poco la decisión de decir me voy a decantar por este camino.
Yo empecé a estudiar filología hispánica pero luego monté una empresa y durante ese tiempo siempre estaba escribiendo. Es una cosa que siempre ha estado ahí pero a la que no le das mucha importancia hasta que son los lectores, los que le dan esa importancia.
Se te ha descrito en varias ocasiones como una promesa de las letras, ¿cómo se sientes al escuchar eso sobre ti?
Al final esas son cosas de las editoriales, son técnicas de marketing con las que a veces te sientes un poco abrumado. Lo que tiene que hacer cada autor es seguir avanzando, aprendiendo y ofreciendo algo nuevo que es lo más complicado y no darle más importancia a lo demás.
La relación con las Redes Sociales
A pesar de tu juventud y es que apenas sobrepasa de los 30 años, ya tienes publicadas más de 10 novelas y estás considerada como la autora más relevante del género romántico ¿eres consciente de lo que significan para tus lectores tus novelas? ¿Cuáles son las ventajas e inconvenientes que ofrecen las redes sociales?
La verdad es que del todo no, pero hay días que recibes un mensaje y te sorprende y hay otros que ni siquiera lo piensas, pero de repente te llega este feedback de felicitaciones. Y eso es algo que antes de las redes sociales no existía.
En relación a las redes sociales, hoy en día tienes que tener claro que hay una parte negativa que no son solo las críticas y que por supuesto tienen que existir porque no a todos les tiene que gustar lo mismo.
Pero también implica otras cosas, entre ellas el tiempo que le tienes que dedicar a redes y estar pendiente del móvil todo el día. Y claro está esa parte de interacción con los lectores, pero a veces hay que cortarla y centrarse en el folio en blanco, sin fijarnos en otros estímulos.
El proceso de escritura
¿Y cómo es ese momento de enfrentarse al folio en blanco?
Yo entre novela y novela necesito unos meses de pausa y voy madurando la siguiente idea. Normalmente cuando te sientas a escribir tienes una idea, pero en mi opinión es que cada novela que va pasando es más difícil porque no quieres hacer nada “peor” que lo anterior y tienes un poco más de presión.
Es cierto que cada novela que escribas es para ti, pero en realidad la están esperando muchas personas y eso quieras o no, es inevitable que te afecte un poco.
Como ya hemos expuesto antes, todas tus novelas son de temática romántica, ¿alguna vez has pensado en escribir otro tipo de género?
Sí, ahora mismo estoy terminando una novela que es de corte sentimental y que tardará un poco más en ver la luz pero sí es verdad que las siguientes novelas, que aunque el amor sigue siendo una parte fundamental, es cierto, que se está yendo a otros géneros como el sentimental, familiar y creo que es el curso natural para no repetirte y porque no te apetece profundizar en otras cosas o jugar con estructuras.
Más sobre sus novelas
Yo lo expuse hace poco, en el post sobre “Nosotros en la luna” que aunque ya había leído varias novelas tuyas destaco el trabajo que hiciste con “El chico que dibujaba constelaciones”, esa novela me pareció íntima y muy personal, aunque es complicado decidir, se te tuvieses que decantar por una ¿cuál sería? Y ¿por qué?
Probablemente también sería esa, “El chico que dibujaba constelaciones” porque como tú dices es la más personal y la más íntima. Estaba en un momento que fue como un refugio el ponerme a escribir.
Es una historia que está muy ligada a mis abuelos, a mis padres por lo que dejé mucho de mí en esa historia. Después, de esa también les tengo mucho cariño a otras como “El día que dejó de nevar en Alaska” y a esta última “Nosotros en la luna”, quizás me quedaría con esas tres.
El año pasado arrasaste con la publicación de la bilogía “Deja que ocurra” y en menos de un año has regresado con “Nosotros en la luna”, ambas novelas tienen tintes similares, pero a mi modo de ver esta última tiene una evolución mucho más madura de sus personajes ¿tú tienes la misma percepción?
Sí, es que hay que tener en cuenta que conforme salen los libros en editorial no es el proceso de escritura muchas veces. La bilogía realmente la escribí hace 3 años y después de ella escribí “El chico que dibujaba constelaciones” y después “Nosotros en la luna”; lo que pasa es que a veces el ritmo de publicación es variable.
Al final se tiene que notar una evolución, han pasado 3 años y también vas leyendo y aprendiendo más y eso se tienen que notar, por eso para mí sí que son muy diferentes. “Nosotros en la luna” es un poco más adulta y madura y creo que esa es la intención.
¿Has vuelto a releer alguna de tus novelas? ¿Notas muchas diferencias con respecto a tu escritura o proceso de escritura?
Sí, mucho de hecho me parece muy duro volver a releer las primeras novelas de uno mismo, me parece algo complicado. Las que tengo publicadas con editorial no puedo cambiar nada y prefiero no leerlas. Pero sí que hay alguna en Amazon que sí he vuelto a corregir y le añadí bastante, en ese caso fue “Otra vez tú” y en breve quiero hacer lo mismo con “Sigue lloviendo”.
Entonces si al menos tengo la posibilidad de poder retocar y cambiar es menos traumático, de la otra manera me parece durísimo. Es que de la otra manera quieres “mandar el libro volando” y si no te pasa eso es que no has evolucionado nada.
Más sobre su novela “Nosotros en la luna”
Ginger y Rhys son los protagonistas de tu última novela, ambos se conocen de manera accidental y desde entonces se escriben casi a diario, durante sus conversaciones hablan de todo tipo de temas y se expresan tal y como son, sin florituras ¿por qué crees que les es tan sencillo esa comunicación? ¿Es más sencillo exponernos ante los desconocidos que ante nuestros familiares o amigos?
Sí, creo que en el caso de ellos el hecho de escribir es un acto de intimidad. De hecho, cuando tú escribes un diario que no le escribes a nadie es una manera de pausa en la vida en la que entras en lo que estás haciendo y pones en orden tus propias ideas.
Entonces, es un poco jugar con eso, ellos reflexionan mucho incluso sobre ellos mismos a la vez que están hablando al otro. Por lo que el hecho de mandar emails me dio mucho juego, y luego quería que sonara natural como hablarían dos chicos de unos “veintitantos” años, por lo que hay conversaciones más ligeras, más de broma y hay otras más profundas.
Uno de los aspectos más destacados del libro es el tiempo y que ambos experimentan unos grandes cambios a nivel personal, pero a pesar de ese transcurso son pocas las ocasiones en las que se ven ¿crees que se tienen idealizados o de verdad se complementan?
Sí que se complementan, pero lo importante es hacerlo en el momento y en el lugar adecuado que es lo que ellos no encuentran a lo largo de la novela. Creo que cuando se conocen buscan cosas distintas y están en diferentes puntos y entonces pasa el tiempo y van en direcciones opuestas.
Hay veces en las que se encuentran en el camino pero se vuelven a separar hasta que los dos lleguen a ese punto de encuentro. Entonces, es cierto, que el hablar con alguien a distancia se puede idealizar un poco, es por ello que quería que hubiese algunos encuentros para que no fuese la novela solo epistolar.
Crossover y moralejas literarios
Algo que me sorprendió mucho durante la lectura fue la aparición de Axel, uno de los personajes principales de tu anterior bilogía, yo lo consideré como un crossover literario, ¿sería posible que Ginger o Rhys aparecieran en tu próxima novela o mejor aún harías una novela donde confluyesen los cuatro personajes?
Pues nunca se sabe, puede ser. Pero no me gusta forzarlo en este caso fue ¿dónde mando a Rhys? pues lo llevo a Australia y todo me cuadró. Ya lo he hecho otras veces pero lo que cuesta es que no salga forzado, que sea natural y que cualquier lector lo pueda entender aunque no haya leído la bilogía. Pero no descarto eso del crossover.
Algo que me suelen pedir los lectores son los epílogos y soy muy consciente de que mis últimos epílogos son muy escuetos, pero es porque no quiero forzarlo y que cada uno se imagine lo que quiera porque el final está cerrado.
En esta novela predominan las ganas de superación y de creer en ti mismo por encima del amor romántico, o al menos esa ha sido mi perspectiva ¿cuál fue tu intención? ¿Tienes alguna especie de moraleja para cada uno de tus libros?
Claro, al final cuando escribes quieres trasmitir algo y que el lector se identifique. Yo creo que todos nos hemos sentido “perdidos”, que no encontramos nuestro lugar. Cuando hay gente que habla de comedia romántica sin haberlo leído o sin conocerla, se piensa que la novela romántica es solo una trama de amor.
Eso no es así, todas las novelas románticas hablan de más temas, se habla de maternidad, de no maternidad, de sentirnos perdidos, de problemas laborales o de problemas entre padres e hijos.
Una buena novela romántica tiene que estar rodeada de más sustento. Para que te guste una novela tienes que sentir algo, que a ti te toque de manera personal.
Los nuevos proyectos de Alice Kellen
Cualquiera de tus novelas sería una estupenda opción para llevarla al terreno cinematográfico, pero quizás por la trama la más idónea sería “Nosotros en la luna” que preferirías ¿serie o película? ¿Tienes pensados a los actores que harían de Ginger y Rhyn?
Pues no sé, en este tema me pierdo un poco pero quizás “Nosotros en la luna” pegaría más para una película para que fuese más directa y pasasen más cosas, la verdad es que sería interesante. Me cuesta imaginármelo pero ojalá.
Por ejemplo a Ginger la veo como a Emilia Clarke pero en morena y a Rhys lo veo como a Boyd Holbrook, pero luego casi nunca las adaptaciones se parecen, es muy difícil.
Aunque esta novela acaba de salir al mercado, todos los lectores estamos con ganas de más ¿veremos otra novela de Alice Kellen en 2021? ¿O ahora estás en un momento de relajación e inmersa en esta última publicación?
Sí, algo habrá, pero muy distinto a lo que he hecho anteriormente porque no será la que te comentaba que estaba terminada sino una novela que estoy escribiendo ahora, pero con una trama diferente, no creo que se parezca a nada de lo que he hecho ahora.
Los favoritos de Alice Kellen
Para la bilogía “Deja que ocurra” pusiste como banda sonora a The Beatles ¿cuál pondrías para “Nosotros en la luna”?
Yo creo que para esta novela pondría cualquier canción de Avici.
Y ya para finalizar, te quiero proponer la pregunta que le hago a todos mis entrevistados y es que me genera curiosidad los gustos literarios de los escritores ¿tú a quién nos recomendarías? ¿Qué novelas consideras imprescindible en tu estantería?
Me gusta mucho la novela sentimental, actualmente la autora que más me gusta es Taylor Jankins, aunque también me gusta mucho Jojo Moyes o Kristin Hannah. Son un grupo de autoras que hacen un estilo similar de libros en cuanto a género pero las temáticas no se parecen en nada y creo que tienen mucho talento.
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