Letras
‘Fecha de caducidad’ la lírica decepción de Darío Márquez
A Darío Márquez le dieron en septiembre el Premio Antonio Carvajal de poesía joven. El jurado así lo decidió por unanimidad después de leer Fecha de caducidad. El jurado observó, dice el acta, un libro medido, "con ritmo muy fluido, que abarca una larga trayectoria de la vida humana, en una sucesión de recuerdos del pasado, del presente y del futuro, y cuya unidad formal, en los diversos tonos que los poemas reclaman, no cae jamás en la monotonía".
Letras
‘Hechos a mano’, de Víctor del Moral: el valor eterno del instante
Hechos a mano ganó el pasado mes de diciembre el XXXVII Premio Jaén de Poesía. Dice una nota preliminar a esta edición que el jurado eligió, por mayoría, la obra titulada 'Hechos a mano' de Víctor del Moral. El jurado, en su decisión, subrayó la "calidad en la construcción de los poemas, la sensibilidad frente a nuestra precaria condición humana" y la exclusión social, así como la riqueza en referencias culturales, combinando muy bien las experiencias personales con las literarias. Víctor del Moral era la representación jienense de la edición, pues nació en Úbeda en diciembre de 1979. La familia se trasladó pronto a Granada. Del Moral estudió Filología en Barcelona, y es profesor de secundaria en Castilla La Mancha
Letras
‘El escenario’ de Karmelo Iribarren: tragicomedia de los días grises
En El escenario, Karmelo Iribarren es la voz del hombre común que cuenta sus días, días grises, días que se parecen unos a otros salvo en algún destello de luz. La voz que habla en estos poemas anota esos relámpagos con una naturalidad escéptica. En los versos de El escenario se atisba el final, se acerca como una proa avistada en el horizonte del mar. Cada vez más cerca. El escenario está organizado en las calles, en los bares, en las ventanas, algún balcón, el paseo marítimo, la lluvia, más lluvia, las gaviotas, los gorriones, los viejos en las plazas, las estaciones, los cisnes del estanque.
Poesía
Neruda y los placeres elementales
Neruda tenía pasión por la comida. Esa inclinación por la mesa se puede rastrear en sus cuatro libros de odas, donde lo gourmet aparece como un canto a lo elemental de los alimentos. Sin adornos, la comida es esencial y primaria. De entre los libros de Neruda que se dedican al yantar debemos anotar también Comiendo en Hungría, escrito a cuatro manos, con Miguel Ángel Asturias. Ese texto se publicó en 1969. Ya para entonces en Hungría se comía poco, y mal. El comunismo nunca ha tenido una relación placentera y desinhibida con el comer. Neruda será una excepción.
Poesía
‘Los nadies’, la Nicaragua ausente de William Alexander González
Los nadies. William Alexander González Guevara. XXV Premio de Poesía Joven Antonio Carvajal. Editorial Hiperión
En la estela de Eduardo Galeano, con el título homónimo...
Letras
Stefan Zweig, poeta del tiempo de ayer
Dos libros, dos editoriales, coinciden en este otoño en rescatar la poesía de Stefan Zweig, lo menos conocido de un autor muy conocido entre nosotros. La obra de Zweig ha sido popular en diferentes épocas y por distintas razones. Durante un tiempo se celebraron sus biografías de personajes históricos, como María Antonieta, o María Estuardo. La de Fouché es maravillosa y aborda una de las personalidades más fascinantes, por su capacidad camaleónica, del siglo XIX.
Letras
‘Jirafas en el zoológico de Atlanta’ y otras cosas sin nombre, de Álvaro Carbonell
De Jirafas en el zoológico de Atlanta podemos decir, en una aproximación a los hechos, que ha sido ganadora del Premio Valencia Nova a poesía joven en castellano. Su autor es Álvaro Carbonell, nacido en Albatera, en la comarca de la Vega Baja del Segura, tierra del poeta Miguel Hernández. Carbonell nació en 1990, y asegura en alguna entrevista que está todavía buscando su estilo. Lo cierto es que hay en sus poemas un destello de lo cotidiano, un buscar la belleza en los pasillos del Mercadona o en los laberintos del Ikea, o en las asociaciones delirantes del LSD
Letras
‘En donde resistimos’, los versos de la claridad de Francisco Caro
En donde resistimos lleva en su portada, flamante, el anuncio de que ha recibido el Premio Valéncia de la Institució Alfons el Magnánim. En el poema que sirve de prólogo a la obra, el poeta aparta los papeles, deja la escritura y se dedica a la contemplación del "agua anónima, serena, sobre los agotados campos, y escucha su bondad" Y dice un gracias porque "sabe que en ese soplo de vida, en esta sencillez que nada pide, habita la humildad de la belleza". En ese marco se desarrolla En donde resistimos, que tiene dos partes, una titulada Conversaciones; la otra Días. Más un largo poema sobre dos cómicos.